Vera niega tras las críticas de sindicatos y oposición que los turnos de Urgencias sean “un capricho”
Un “miedo al cambio” habitual pero que, tras conocer las nuevas Urgencias, acabará pasando. La consejera navarra de Salud, Marta Vera, ha valorado de esta forma las dudas mostradas por la Comisión de Personal, el órgano que agrupa a los sindicatos, del Complejo Hospitalario de Navarra y, en concreto, a los nuevos horarios previstos para esta infraestructura. Esta arrancará su andadura el próximo 8 de octubre, a las 08:00 horas, y, según Vera, para ese momento “la plantilla estará dimensionada con creces para que no haya ningún colapso”. La consejera ha realizado ante el Parlamento de Navarra una defensa cerrada de este recinto y de sus preparativos y, además, de esos turnos que han generado el rechazo de los representantes de los trabajadores. Sin embargo, la representante del Gobierno Foral ha asegurado que no es un capricho de un gestor, sino una medida eficaz.
Vera, que ya esta semana había acudido a la Comisión de Salud para responder (con bastante revuelo) a la polémica marcha del exgerente del Servicio Navarro de Salud, Juan José Rubio, ha vuelto a este foro, esta vez para explicar las dudas de la plantilla en torno a la organización de las nuevas Urgencias y, en especial, de sus turnos. En concreto, del llamado turno deslizante, que por ejemplo por las tardes plantea un horario, en lugar del rotatorio más habitual (de mañana, tarde y noche), que se alarga de 17:00 a 00:20 horas.
A este respecto, la consejera ha defendido que este turno no es nuevo, sino que ya venía aplicándose desde hace siete años en el hospital Virgen del Camino, que era una solicitud de la jefatura del área y que, en el caso de las enfermeras, les afectará en turno de tarde cinco días no consecutivos cada 68 semanas, mientras que en el de las auxiliares de Enfermería será cada 39. Por ello, Vera ha insistido en que esta medida “no es un capricho de nadie”, sino un sistema que ya ha probado su eficacia, ya que permite reforzar la plantilla en horarios “críticos”, cuando una mayor demanda en las Urgencias puede coincidir con los cambios de turno del personal. Además, se ha mostrado convencida en que las críticas de los sindicatos obedecen solo al miedo al cambio, y que se acabará superando cuando los profesionales sanitarios conozcan las condiciones, la tecnología y las ventajas del nuevo edificio. “Tendremos una atención exquisita”, ha vaticinado.
UPN asegura que “no habrá colapso”
Estas declaraciones contrastan con las realizadas la semana pasada por la presidenta de la Comisión de Personal, Begoña Ruiz, quien pidió al Gobierno Foral que retirara este turno deslizante y que retomara la negociación de los horarios. Grupos parlamentarios como Izquierda-Ezkerra y Bildu se han hecho eco precisamente de estas diferencias para criticar la falta de organización de este proyecto, cuando apenas queda una semana para su apertura final. El PSN también ha lamentado que, pese a las ventajas que supondrá la inauguración del edificio, no se haya logrado llegar a un acuerdo con los profesionales encargados de ponerlo en marcha. Desde Aralar-NaBai incluso se han preguntado si hay una posibilidad de huelga.
Vera, por su parte, ha defendido la cantidad de reuniones realizadas para preparar las nuevas Urgencias desde el pasado mes de enero, “aunque podría remontarme a antes”. “Yo a esto no le llamó una negociación de paripé”, ha apuntado. Sobre la posibilidad de que estas diferencias, como ha temido la oposición, pueda provocar un colapso de las Urgencias, desde el grupo parlamentario de UPN han negado la mayor, asegurando que puede haber “disfunciones” puntuales “sin ninguna duda” en este proceso de cambio, pero “no habrá colapsos”.