Los 'descuidos' de Almeida con la candidatura de la UNESCO

20 de junio de 2021 21:48 h

Como muchos otros proyectos y obras, Almeida hereda el expediente de la candidatura del Paseo del Prado y Jardín del Buen Retiro a Patrimonio Mundial de la Unesco y debe llevarlo hasta el final. Hereda un trabajo largo que atraviesa mandatos y que, en el de Manuela Carmena, alcanzó el modelo más consensuado de todos con la creación del Comité Cívico Social para sumar conocimiento, cuidados y alianzas entre institución, entidades sociales y administraciones y que tanto ha valorado ICOMOS, la entidad evaluadora de la candidatura de Madrid.

El cometido del alcalde es continuar en esa misma senda para conseguir ser Patrimonio Mundial de la UNESCO (candidatura que ha implicado también un esfuerzo ímprobo del propio personal municipal para trabajar en la dirección indicada). Sin embargo, con el desmantelamiento de buena parte de las políticas culturales y de participación ciudadana del anterior mandato y con un modelo de ciudad basado en el coche, incapaz de luchar seriamente contra la contaminación, Almeida rema sistemáticamente en dirección contraria. 

Con el PP en el Ayuntamiento se ha instalado un modelo cultural y medioambiental ajeno y contrario a la línea que están siguiendo la UNESCO y las ciudades europeas para afrontar los desafíos del cambio climático, la urbanización descontrolada, el turismo de masas y el desarrollo socioeconómico sostenible.

Porque el primer descuido de Almeida, fundamental para el futuro de nuestra ciudad, es desmantelar Madrid Central, la zona de bajas emisiones que pusimos en marcha en 2019 y que se ha convertido en la más eficaz de Europa. A ver qué respuesta va a dar el alcalde al informe de ICOMOS que dice muy claro (y literal) que ''la contaminación atmosférica, provocada principalmente por vehículos privados a motor, es el factor más importante en cuanto a la afección del bien candidato''. Y, sin embargo, ahora el Gobierno municipal va a dejar entrar más vehículos al centro de la ciudad y parece que vamos a seguir siendo la capital europea con más muertes por contaminación. Nuestra propuesta, nuestra respuesta, ha sido siempre tajante: hay que restituir Madrid Central, ampliarlo e implantar zonas de bajas emisiones en los distritos exteriores a la M-30, en línea con la Ley de Cambio Climático recientemente aprobada.  

El segundo descuido del PP también viene de la mano del Área de Movilidad y Medioambiente. Como hemos dicho, ICOMOS subraya que hay elementos que atentan contra la integridad del Bien como los problemas que generan los aparcamientos de autobuses y subterráneo en el barrio de Los Jerónimos. Almeida no tiene bastante con suprimir Madrid Central, sino que, de nuevo, haciendo caso omiso de las indicaciones del informe va a incrementar este problema con el macroaparcamiento de Menéndez Pelayo, que tendrá un efecto llamada para miles de vehículos. Esta irresponsabilidad –que, además, cuenta con la oposición vecinal– no es más que otro paso atrás en el cuidado del medio ambiente, uno más. 

Y, por último, un tercer descuido ha sido no consultar al Consejo Cívico Social, creado en 2018 como uno de los entes más emblemáticos de la candidatura, porque representa a la sociedad madrileña y promueve la participación y el diálogo. En el propio informe, ICOMOS apunta también que se debe acudir más a este Consejo y evitar reducirlo a un ente reactivo. 

Pero cómo no, aquí se procede al revés. Ni se consulta con el Consejo para decidir sobre el traslado de instituciones dentro del área del bien (Medialab), ni se cumple con la palabra dada de no efectuar dicho traslado hasta que se vote la candidatura desde la UNESCO. ¿Tiene solución? Por lo menos, cumplir la promesa dada y abandonar la vía de los hechos consumados, haciendo caso a las propias recomendaciones de ICOMOS sobre las atenciones que debe tener el Consejo Cívico Social.

En fin, gobernanza, participación, calidad del aire, cuidado del medioambiente... todas las medidas que sugiere la evaluación sobre nuestra Candidatura del Prado y Retiro a Patrimonio de la UNESCO tienen que ver con el modelo de ciudad que pusimos en marcha en la legislatura pasada, el modelo que están desarrollando las principales capitales europeas y que vamos a seguir defendiendo en Más Madrid.

En octubre de 2019 nos reunimos en Medialab en el pleno del Comité Cívico y Social, nos escuchamos todos y todas las entidades, instituciones, gobiernos y oposición. Había un incontestable ambiente de consenso. Lo que ha pasado desde entonces hasta ahora solo tiene un nombre, el alcalde Almeida, al que instamos a sumarse a las políticas culturales vinculadas al desarrollo sostenible y la cohesión social y a las políticas medioambientales alineadas con los ODS de la Agenda 2030 y la Ley de Cambio Climático. Por el bien de la Candidatura y por el bien de Madrid.