Griñón, Pozanco, Blasconuño de Matacabras y otros 70 pueblos en los que ha ganado Vox
A Vox no le ha ido demasiado bien en su búsqueda de escaños en las provincias España vacía. De las 28 provincias que reparten cinco diputados o menos, el partido solo ha conseguido representación en dos: Ciudad Real y Valladolid. Sin embargo, la formación de extrema derecha sí ha calado en pequeños pueblos de varias de estas provincias: en Ávila, Cuenca, Burgos, Guadalajara, Huesca, León, Palencia, Salamanca, Soria o Teruel. El partido de Santiago Abascal ha sido la fuerza más votada en 73 municipios españoles, la mayoría de menos de mil electores.
El más pequeño es Rebollosa de Jadraque, en Guadalajara, donde votan diez personas de las cuales cuatro se han decantado por Vox.
De hecho, Guadalajara es la provincia con más pueblos en los que ha ganado Vox con un total de 13. De más poblado a menos poblado, estos son Pioz, Yebes, Loranca de Tajuña, Valdeaveruelo, Tórtola de Henares, Matarrubia, Torre del Burgo, Viana de Jadraque, Pardos, Valdseotos, Casas de San Galindo, Condemios de Abajo y Rebollosa de Jadraque.
En Madrid, donde Vox ha obtenido más de medio millón de votos (520.417), han sido nueve los pueblos en los que ha quedado ganador. Es la segunda provincia que más tiene. De menor a mayor, son Garganta de los Montes, Ribatejada, Villamantilla, Navas del Rey, Navacerrada, Serranillos del Valle, Torrejón de Velasco, Robledo de Chavela y Griñón, el más grande con 7.515 electores.
Allí Vox ha obtenido 1.548 votos, un 25,6% del total, y ya en las pasadas elecciones municipales rascó algunos (159).
Sitios con mucha inmigración
Los únicos municipios medianos, de más de diez mil votantes, en los que el partido ha quedado primero están en el litoral. Son El Ejido y Níjar, en Almería, y Torre-Pacheco, en Murcia.
Vox ya arrasó en las elecciones andaluzas en El Ejido, una ciudad de 84.000 habitantes en la que el 34% de la población es inmigrante, principalmente marroquí, que acude a trabajar. Es el municipio más grande del llamado 'mar de plástico', la zona de Almería plagada de invernaderos dedicados a la agricultura intensiva. El partido de extrema derecha también ha quedado primero en Níjar y Balanegra, ciudades cercanas y con economía similar.
Aunque cuando ganaron en las andaluzas aún no tenían ni grupo allí, los resultados dejan entrever que su discurso anti inmigración ha calado entre algunos de los votantes. Torre Pacheco, único municipio murciano en el que Vox es la fuerza más votada, también tiene un tercio de población inmigrante vinculada al sector agrario.
El resto de pueblos de Vox están en el interior, principalmente en Castilla la Mancha y Castilla y León, en provincias con cierta vinculación a la caza como Toledo, Ávila, Soria o Valladolid. De todos, destacan Casas de San Galindo (Guadalajara), Belmonte de Campos (Palencia), Gotarrendura (Ávila), Alcocero de Mola (Burgos), Pozanco (Ávila) y Torrecilla de la Torre (Valladolid), donde se ha llevado más del 40% de los votos - aunque, en cualquier caso, estos son siempre menos de 110.
Recordemos que Vox se ha acercado mucho a este nicho del electorado, que propone proteger la caza y que incluso ha fichado al presidente de la Federación de Caza para ir en sus listas europeas. Su discurso “anti-progre”, en parte “anti-urbanita”, ha hecho algo de efecto en sitios profundos de la España vacía, pero no el suficiente. Si en 2016 la tercera fuerza beneficiada en estas zonas, por detrás del PSOE y el PP, fue Podemos - que se llevó veinte escaños - en estas elecciones ha hecho lo propio Ciudadanos con 19. El partido liberal ha conseguido escaño en Ávila, Zamora, Teruel, Segovia, Palencia, Huesca, Guadalajara, Salamanca, León, La Rioja, Cáceres, Burgos, Albacete, Valladolid, Huelva, Jaén, Ciudad Real, Castellón y Cantabria, muy por encima de los dos de Vox.