Madrid, 16 dic (EFE).- El juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente ha acordado mantener las medidas cautelares que ya pesaban sobre el empresario Víctor de Aldama y, tras su declaración, ha acordado que siga sin poder disponer de su pasaporte y le ha impuesto la obligación de comparecer cada 15 días ante el juzgado.
Al finalizar su comparecencia como investigado, en la que ha insistido en que cobró y pagó comisiones a cargos públicos como el exministro José Luis Ábalos, la Fiscalía y la acusación popular que ejerce el PP han pedido mantener las mismas medidas cautelares que ya acordó contra De Aldama el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno.
Como el magistrado del Supremo asumió también la investigación contra De Aldama, ha accedido a que el empresario siga teniendo medidas cautelares, en concreto la retirada del pasaporte y la prohibición de salir del país, y la obligación de comparecer en el alto tribunal cada 15 días.
Y lo hace porque no solo “persisten los indicios de criminalidad” contra él, sino que “se refuerzan” tras las declaraciones prestadas por él mismo, según su auto, en el que advierte de que, de no cumplir las cautelares, se podría acordar su ingreso en prisión.