Ya se han repartido los papeles. Pedro Sánchez ha decidido: Adriana Lastra será finalmente vicesecretaria general del PSOE. Es una figura que ha existido en otras ejecutivas, pero que no formaba parte del organigrama en la anterior dirección de Pedro Sánchez.
Lastra fue junto con José Luis Ábalos la coordinadora de la campaña de Sánchez para las primarias en las que venció a Susana Díaz y Patxi López. A ambos les prometió un puesto relevante en el nuevo PSOE. Los dos querían un cargo de importancia orgánica: la secretaría de organización.
Sin embargo, Sánchez decidió hace unos días nombrar a Ábalos responsable de organización. Con esa decisión, el futuro de Lastra quedaba en el aire porque el diputado valenciano también se había hecho cargo de la portavocía en el Congreso y, aunque dijeron que sería un encargo provisional, fuentes socialistas apuntaban a que había voces que pedían su continuidad tras el congreso de este fin de semana.
Algunos socialistas sostienen que el perfil de Ábalos encaja mejor en ese puesto parlamentario para intentar limar asperezas en un grupo profundamente dividido y que apoyó de forma mayoritaria a Susana Díaz. Lastra tiene un carácter más duro. Ábalos será quien interpele a Rajoy en la sesión de control prevista para la próxima semana.
Fuentes próximas a la diputada asturiana daban por hecho hace unas horas que no tenía sentido tener un puesto como la vicesecretaría general si era portavoz porque ese cargo ya conlleva un asiento nato en la Ejecutiva. Ahora Lastra sube un escalón en Ferraz y ocupa el puesto que tuvo, por ejemplo, Elena Valenciano en el mandato de Alfredo Pérez Rubalcaba.
Sánchez tendrá que determinar a quién escoge para la portavocía en el Congreso. El estreno de Ábalos en el debate de la moción de censura ha gustado de forma generalizada en la bancada socialista. Fuentes próximas al diputado valenciano aseguran que esa decisión se abordará el próximo lunes.