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Alberto Garzón apela a la guerra cultural para cambiar Europa

La reactivación de la movilización social ha marcado la última mesa de las jornadas del Plan B para Europa impulsadas por Yanis Varufakis. Dirigentes de partidos de izquierda con representación institucional como Alberto Garzón, Pedro Santisteve o Mónica Oltra han instado a ello durante el encuentro. Pero el más incisivo ha sido Garzón, que ha llamado a centrarse en otra lucha para alterar la correlación de fuerzas y cambiar las instituciones: la guerra cultural.

“Todo estriba en doblegar a esas instituciones, marcadas por la ideología neoliberal, a través de la movilización social y la guerra cultural. Esa es la visión que no permitiría centrarnos”, ha dicho el diputado de IU-UP durante su intervención frente a una sala abarrotada y que no ha podido acoger a todos los interesados en asistir al acto de cierre del Plan B. Unas palabras de Garzón donde no ha habido referencias a las negociaciones para formar gobierno.

El líder de IU también se ha centrado en el discurso que debe transmitir la izquierda para lograr canalizar ese descontento de la ciudadanía europea. Por eso ha querido advertir que si “no lo hacemos nosotros, lo hará la extrema derecha con su discurso más ligero, de que te garantizan tus condiciones de vida”. Como ejemplo ha puesto los cambios políticos en el norte de Europa, donde las fuerzas ultranacionalistas crecen con fuerza. De que ocurra esto ha culpado a esas instituciones europeas, a las que responsabiliza del “riesgo” del resurgir del fascismo en los países europeos. Una situación que ha descartado que se produzca en España gracias al “cortafuegos” que supuso el 15M, según Garzón.

Para avanzar hacia ese plan B y derrotar a la extrema derecha, ha instado a “hablar para que nos entiendan las clases populares, ya que si no nos entienden no será culpa suya”. Entre las ideas que ha aportado está la de “construir una identidad desde los problemas cotidianos de la vida”, recordando que la “democratización” de la UE no es solo cambiar las instituciones. “Sin empleo, pasando hambre y viviendo a expensas del mercado tampoco hay democracia”, ha asegurado.

El fin del “chantaje a la gente”

En relación a la advertencia de Garzón, la expresidenta del Parlamento griego Zoe Konstantopoulou, que conoce bien la fuerza de partidos neonazis como Amanecer Dorado, ha recordado que la llegada de Syriza pudo suponer “el fin de las decisiones que hacían daño a los griegos”. Su discurso ha estado marcado por su labor al frente de la cámara griega, por lo que ha recomendado utilizar mecanismos democráticos para contener a los poderes que generan esas contradicciones en Europa. “Hay que acabar con el chantaje a la gente”, ha dicho.

La eurodiputada de Podemos Tania González también ha mencionado los cambios que a su juicio mejorarían la UE. El principal ha sido la idea de repensar la Comisión Europea, a la que ha tachado de “opaca”, además de impulsar un giro radical al actual Banco Central Europeo. Para González, todo cambió en las elecciones europeas de 2014, donde se vio que iba a haber un cambio en la representación de fuerzas en el futuro. Esto le ha servido para denunciar la “gran coalición” que existe en el Parlamento Europeo y que según ella evidencia lo que interesa al poder europeo. “Hay que revertir ese pacto de estabilidad que permiten los poderes europeos y que nos lleva a una Europa de dos velocidades”, ha afirmado.

Los dirigentes del cambio alertan del “juego sucio”

Alcaldes como el de Zaragoza, Pedro Santisteve, o el de Pamploma, Joseba Asirón, han hecho balance de sus gestiones durante el último acto de Plan B. En sus intervenciones han defendido el trabajo realizado y han denunciado la campaña que hay contra ellos desde varios sectores, a través del “juego sucio” de sus adversarios y de algunos medios de comunicación. En ese mismo sentido se han pronunciado la vicepresidenta del gobierno valenciano, Mónica Oltra, y el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Gerardo Pisarello.

Todos ellos han apelado a no quedarse encerrados en casa y llevar ese cambio de sus ciudades o comunidades a Europa. Asirón ha puesto de ejemplo la búsqueda de “ciudades rebeldes con las que crear redes solidarias” para “romperle la cintura a los estados”. Oltra ha llamado a que la “refundación” que se da en los parlamentos españoles se produzca también en Europa. “Ahora no hay casi mayorías absolutas, es el ejemplo”, ha dicho. Para Pisarello, la clave es “cambiar los mecanismos tradicionales”, lo que implica mayor control de los responsables políticos, que deberían poder ser revocados de sus cargos si no cumplen bien su función.

El acto, que ha comenzado con casi 45 minutos de retraso y ha estado dividido en dos bloques, también ha servido de homenaje para dos sahararuis presentes en la sala a los que el alcalde de Pamplona ha puesto de “ejemplo”. “Una nueva Europa no puede olvidar al pueblo saharaui”, ha dicho Joseba Asirón.