El expresidente de la Generalitat, Artur Mas, ha arropado esta mañana al portavoz del CDC en el Congreso, Francesc Homs, en su declaración ante el Tribunal Supremo por la consulta soberanista del 9N. En este proceso, ha dicho Mas, no está en juego la independencia de Cataluña, que se dirigirá en una consulta “definitiva”, sino que está en juego “la democracia misma”.
A la entrada del Tribunal, Más ha dicho que este es un “proceso político” y no judicial, y para apoyar esta información ha citado la operación Cataluña, con las que desde “algún Ministerio se afinaban a los fiscales” . “Todos los fiscales de Cataluña dijeron que no había delito”, ha añadido.
Mas ha argumentado que la consulta soberanista fue un “acto plenamente democrático, plenamente pacífico”, y se ha sorprendido de que la justicia les investigue “por escuchar a la gente”. Ha rechazado que la consulta fuese anticonstitucional porque el Tribunal Constitucional “no aclaró que había que suspender” cuando la Generalitat se lo preguntó y porque el referéndum era para saber quién estaba a favor y en contra de la independencia, una consulta “no vinculante”.
Además de por el presidente catalán, Homs ha llegado a acompañado de un nutrido grupo de representantes del Govern, de la política catalana, pero también del PNV, como Aitor Esteban, o de Unidos Podemos, con su diputado Marcelo Expósito.
Por el Govern ha acudido, entre otros, la consejera de Presidencia, Neus Munté, y la exconsejera Irene Rigau, que ha criticado que Homs tenga que declarar por “mejorar la democracia y dar voz a los ciudadanos de Cataluña”. “La baja calidad democrática de España interpela a todos los demócratas” ha dicho, para luego añadir que “las urnas no pueden ser nunca el problema”.
También ha arropado al exconsejero de Presidencia el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardá, que ha asegurado que el Estado español ha optado “por la represión, por la violencia judicial”, lo que deja en mal lugar, ha dicho, esta “democracia low cost”. Aitor Esteban, por su parte, ha explicado que su presencia hoy en el Supremo es obligada porque el PNV defiende que “consultar a la gente nunca puede ser un delito”, y ha hecho hincapié en que se trata de “un problema político” que no se puede afrontar “mediante vías judiciales”.
Marcelo Expósito, diputado de Unidos Podemos y miembro de la Mesa del Congreso, ha calificado de “espectáculo absurdo” que Homs se vea obligado a declarar y ha apelado a “la unidad de todas las fuerzas soberanistas para plantear que este problema político se tiene que resolver por vías estrictamente políticas y no judicializando el problema”.