Lucía Carrero Blanco, nieta del presidente del Gobierno franquista Luis Carrero Blanco, asesinado por ETA en 1973, considera un “absoluto disparate” que se solicite una pena de dos años y medio de prisión para una joven de 21 años por publicar mensajes en Twitter mofándose del crimen.
Aunque deja claro que le “repugna” que se intente hacer humor con un asesinato, afirma que le “asusta una sociedad en la que la libertad de expresión, por lamentable que sea, pueda acarrear penas de cárcel”, en una carta publicada en 'El País', con el título “Enaltecimiento del mal gusto”.
“Yo no sé de asuntos jurídicos, no sé en base a qué artículos la fiscalía hace semejante petición, y si lo hace será obviamente porque la ley la ampara. Pero, por muy legal que sea, me parece un absoluto disparate. No creo que sea ni proporcionada ni ejemplarizante. Tan solo atemorizadora, y no solo para la acusada, sino para todos los que vivimos en una democracia”, argumenta en su texto.
La nieta del dirigente franquista se declara “firme contraria a la violencia”, ya provenga de “ETA o el GAL, Obama o El Che” y dice que le “horroriza que se intente legitimar cualquier asesinato (incluido el de Bin Laden, en su día aplaudido por los jefes de Estado de medio mundo)”. Añade que le “entristece que se haga burla de ello”, como ciudadana y tal vez “algo más por ser hija de un padre al que le mataron al suyo”.
Dos años y medio de prisión
Para Cassandra Vera, una estudiante de 21 años, unos tuits sobre Carrero Blanco pueden significar dos años y seis meses de prisión y otros tres de libertad vigilada. Es lo que pide la fiscalía, que ve en estos mensajes, publicados entre noviembre de 2013 y enero de 2016, un delito de humillación a las víctimas y de enaltecimiento del terrorismo. Ahora el caso está pendiente de la apertura de juicio oral en la Audiencia Nacional.
En su carta, la nieta de Carrero Blanco contradice las tesis de la fiscalía y afirma que no ve ningún “crimen” en los mensajes de Cassandra: “Lo que ha escrito esta persona no me humilla en absoluto”.
“Lo que me preocupa es que un acto de patente mal gusto y carencia de toda sensibilidad se considere un crimen”, afirma a propósito de los tuits. “Considero un error peligroso tratar de que la ciudadanía sea respetuosa a base de amenazas y sanciones desmedidas”, porque “el miedo jamás genera respeto, solo rencor”.
“Y creo que, efectivamente, hay un enaltecimiento pero, como he dicho, del mal gusto y de la falta de sensibilidad. Confío por el bien de todos en que esta petición no prospere, y que aprendamos de una vez a tolerarnos los unos a los otros motivados por el respeto, y no por el miedo”, concluye en su carta.
“Nunca llegué a pensar que podría tener consecuencias”
En una entrevista con eldiario.es, la tuitera Cassandra Vera, explicaba que la situación le ha dejado “perpleja”, puesto que explicaba que “nunca había llegado a pensar” que escribir unos tuits satíricos sobre Carrero Blanco podría llegar a tener estas consecuencias.
“Que me pidan dos años y medio por hacer chistes sobre Carrero Blanco es un ataque a la libertad de expresión”, denunciaba Cassandra, que insistía en que “algo falla en la justicia cuando se persiguen unos simples chistes sobre un personaje histórico”.