A pesar del anuncio realizado anoche por el Gobierno sobre la ruptura de las relaciones con el líder del PP, Pablo Casado, después de que ayer éste acusara al presidente del Gobierno de ser “partícipe y responsable del golpe de Estado que se está perpetrando en España” y de que no se retractara en sus palabras a pesar de las continuas petición de Pedro Sánchez, el presidente de los populares ha reafirmado sus acusaciones este jueves. A su juicio, el Ejecutivo tiene “la responsabilidad” de lo que está sucediendo en Catalunya. Pero decirlo no puede suponer, en su opinión, la ruptura con Moncloa. “Yo con el PSOE nunca romperé relaciones, por mucho que nos digan”, ha asegurado.
Durante un desayuno informativo organizado por la Camara de Comercio de EEUU en España apenas 24 horas después del tenso Pleno del Congreso en el que se produjo el rifirrafe con Sánchez, el líder del PP ha acusado al presidente del Gobierno de “victimismo” y de tener “la piel muy fina” por “ofenderse” tras la acusación que le lanzó y que provocó la ruptura. “Aquí no se trata de decir ahora no respiro, me tiro al suelo y pataleo”, ha ironizado. No obstante, ha remarcado que con Sánchez él no tiene “ninguna mala relación personal, ningún problema”.
“Lo que ayer hablamos en el Congreso fue sencillo. Igual que cuando hay un incendio nadie responsabiliza al Gobierno de incendiar el monte, pero sí se le dice que es responsable si no ha puesto medios para apagarlo. Lo lógico es que si se perpetra un desafío a la soberanía nacional, el Gobierno tiene la responsabilidad de evitar la ruptura de la legalidad”, ha insistido.
Casado ha mostrado su “extrañeza” por el anuncio de Moncloa. “A nosotros se nos ha llamado de todo”, ha apuntado. Al expresidente José María Aznar, se le tildó desde el PSOE de “asesino” por su participación en la guerra de Irak; a su predecesor Mariano Rajoy, se le llamó “indecente supuestamente por no vigilar más la conducta de dos alcaldes de pueblos”, en alusión a la condena de Gürtel. “Y resulta que nosotros no podemos decir que un Gobierno es responsable si no aplaca intento de secesión”.
“Esto no es una cuestión de familia”
También ha dicho Casado que él no sabe qué significa la ruptura anunciada por Sánchez. “No sé lo que es eso, esta no es una cuestión de familia”, ha asegurado, antes de lamentar que el Ejecutivo no rompa con el president de la Generalitat, Quim Torra por sus ansias independentistas o con el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, o con el líder de Sortu, Arnaldo Otegi. En opinión del líder del PP, esa “rasgadura de vestiduras” del Gobierno pretende “ocultar el debate” de ayer en el Congreso.
“La ruptura la está haciendo el Gobierno dividiendo el Parlamento entre constitucionalistas y quienes quieren romper España. ¿El Gobierno en qué lado está? ¿Por qué no se mete con los que están dando un golpe de Estado?”, se ha preguntado.
Casado ha insistido en que “a la política se viene llorado”, y ha matizado que él no rompe relaciones “más que con los independentistas y con Bildu”. También ha señalado que desde el PSOE a él mismo le llamaron “indigno” hace unos días, y que la vicepresidenta, Carmen Calvo, le acusó de ser de extrema derecha el mes pasado. “¿Por qué nos pueden insultar a nosotros y nosotros no podemos decir la verdad?”, ha preguntado.
En su opinión, “el PP siempre ha sido un partido de consensos”. “Es la primera vez que un partido que no gana las elecciones, con apoyos poco aconsejables, desalojó al Gobierno que había ganado. Propuse apoyar los Presupuestos si se mantenía la senda de déficit y las previsiones presupuestarias y propuse prestar nuestros votos en el Senado para aplicar de inmediato el 155, para evitar que el chantaje de los independentistas rompieran la unidad de España”.