El PSOE ha pedido este martes en el Senado la dimisión del ministro de Justicia, Rafael Catalá, tras conocerse los mensajes de apoyo que le mandó al expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, cuando estaba imputado por el caso ático. No es el único problema al que se enfrenta el titular de la cartea de Justicia. En el Senado tuvo que responder sobre las trabas que puso el fiscal Anticorrupción, Manuel Moix, a la operación Lezo.
Catalá ha asegurado que “nunca” ha ayudado al expresidente de la Comunidad de Madrid en un tema judicial. “Les aseguro que el ministro de Justicia no tiene ninguna capacidad de influir sobre los jueces ni sobre los fiscales para que una investigación judicial vaya en un sentido o en otro”, ha comentado.
El ministro ha tratado de justificar los sms como un gesto de “amabilidad y educación” tras recibir la felicitación de González por seguir como ministro de Justicia. “El dia 3 de noviembre recibí cientos de mensajes de felicitación por mi nombramiento como ministro de justicia, todos los contesté con amabilidad y educación, entre ellos al de DOn Ignacio González, al que conozco desde el año 1996”, ha justificado Catalá.
Evidentemente nervioso ante los periodistas el ministro ha insistido que a González lo conoce “por una una relación de personalidad con él, no por una relación de amistad”.
Tras quejarse de que el SMS “se ha conocido con una violación flagrante del secreto del sumario, pero parece que eso no importa demasiado en este momento”, Catalá ha explicado que con su mensaje “Ojalá que se cierren pronto los líos'”. quería decir que “tengamos pronto estabilidad porque llevamos un año con un Gobierno en funciones, dos procesos electorales, investiduras fallidas... No me refería en absoluto a cuestiones judiciales, ni con el señor González, solo de que se ordene la situación política en España”.
Anteriormente, Catalá tuvo que aguantar en el Senado como el PSOE pedía su dimisión. El senador socialista Antonio Rodríguez Esquerdo calificó la actuación del ministro como “indigna, inmoral y bochornosa” y pedía su dimisión: “Usted, hoy debe dimitir. Váyase señor Catalá”, le espetó el parlamentario.
Rodríguez Esquerdo, que ha empezado su discurso con el apunte de “el señor Mariano Rajoy ha desertado del control parlamentario”, ha acusado al ministro de estar detrás de “las maniobras del fiscal Moix” para “sabotear el operativo” que llevó a la cárcel a Ignacio González.
El senador socialista ha argumentado que los “ceses y purgas de fiscales” que llevó a cabo del departamento de Catalá no tenían otro objetivo que “sabotear operaciones policiales”. “Ustedes están prostituyendo las instituciones del Estado”, ha concluído.
Catalá ha defendido al presidente del Gobierno, de viaje oficial a Brasil y Paraguay, señalando que está “atendiendo a sus responsabilidades” y los “intereses de todos los españoles”. Respecto a las acusaciones del senador socialista, ha comentado que “es falso que se hubiera paralizado ninguna operación, simplemente había alguna discrepancia, ya que el fiscal Anticorrupción dijo que vincular una operacion de 2011 con una actual podría desvirtuarla”.
El ministro ha manifestado que los socialistas “hacen un gravísimo daño a las instituciones” por alinearse “con las teorías antisistemas” y ha defendido el trabajo de “los 2.400 fiscales que ejercen su labor por el interés general”.
Catalá también respondió a la pregunta del senador Jokin Bildarratz, del PNV, sobre la relación del Ministerio de Justicia con las asociaciones de Víctimas del Franquismo. El ministro ha asegurado que el Gobierno “atienden las demandas de colectivos y ciudadanos” como recoge la Ley de Memoria Histórica.