Los vídeos de las cargas policiales en Catalunya difundidos por toda la prensa europea se han producido durante la jornada del 1-O han causado un grave problema de imagen en la esfera internacional al Gobierno de Mariano Rajoy.
Organizaciones como Human Rights Watch, Oxfam y Amnistía Internacional que velan por los derechos humanos han sido muy críticas con lo sucedido este domingo en Cataluña y dirigentes y mandatarios de toda Europa han pedido diálogo para resolver el conflicto y lamentado los incidentes que, según la Generalitat, han causado más de 700 heridos.
El propio exministro de Exteriores Jose Manuel García Margallo ha admitido este domingo que el Gobierno del que formó parte hasta esta legislatura está perdiendo la batalla de la opinión pública en Europa y debería construir un relato en las instituciones comunitarias y la prensa internacional para enfrentar al que “está imponiendo la Generalitat”.
Durante toda la jornada se han sucedido reacciones muy críticas de distintos países a las noticias que los periódicos europeos difundían sobre la situación en Catalunya. Pese a ello, Mariano Rajoy, destacó en su comparecencia desde el Palacio de la Moncloa al final de la jornada “el apoyo sin fisuras [a su Gobierno] de toda la comunidad internacional”.
Los gobernantes de Grecia y Escocia y líderes de partidos de distinto color político han lamentado la actuación del Gobierno de España y los altercados derivados de la decisión de intentar cerrar los colegios donde se iba a producir el referéndum que el Tribunal Constitucional declaró ilegal.
La primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, ha expresado su “preocupación por las imágenes” de Cataluña. “Independientemente de las opiniones sobre la independencia, todos deberíamos condenar las escenas que se están viendo”, afirmó la dirigente escocesa.
Su homólogo en Bélgica, Charles Michel, también ha señalado que “la violencia nunca puede ser la respuesta”. “Condenamos todas las formas de violencia y nos reafirmamos en nuestra llamada al diálogo”, ha dicho a través de Twitter el primer ministro belga.
Su antecesor Guy Verhofstadt, actual presidente en el Parlamento Europeo del Grupo de la Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa (el mismo grupo de la Eurocámara al que pertenece Ciudadanos), ha reiterado ese llamamiento a buscar una “solución negociada” para el conflicto catalán y lamentado la “violencia indiscriminada”: “Es el momento para rebajar la tensión. El único camino hacia adelante es una solución negociada”, afirma Verhofstadt.
El ministro de Exteriores británico, Boris Johnson, ha recordado que la votación organizada por el movimiento independentista no es constitucional, pero a renglón seguido ha pedido al Gobierno español reconducir la situación.
“Obviamente estamos preocupados por cualquier incidente violento, pero evidentemente este referéndum, tal como yo lo entiendo, no es constitucional, por lo que es necesario un equilibrio”, ha afirmado Johnson en declaraciones a la agencia Reuters. “Esperamos que las cosas se tranquilicen”, dijo desde Manchester donde se celebraba el congreso del Partido Conservador. Su compañero de gabinete y ministro de Comercio británico, Liam Fox, también ha condenado la violencia, aunque ha subrayado que el referéndum es un asunto del Gobierno español.
En Francia, el presidente de la Asamblea, François de Rugy, ha afirmado que no hace falta buscar “quién está equivocado o quién tiene razón”, sino que lo necesario es “buscar una solución”.
El que fuera candidato socialista en las últimas elecciones presidenciales, Benoît Hamon, ha expresado en Twitter su preocupación: “En el corazón de Europa, estas imágenes de agresiones para evitar que la gente vote en Catalunya están llenas de significado y de amenazas”.
Jean-Luc Mélenchon, presidente del grupo parlamentario de la Francia Insumisa, ha afirmado: “El Estado español pierde la sangre fría. La nación no puede ser una camisa de fuerza”.
Uno de los más importantes dirigentes europeos durante los últimos años, Martin Schulz, presidente del Parlamento Europeo hasta el pasado febrero y líder del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) también se ha mostrado muy preocupado por la imagen que España ha dado al mundo este 1-O. “La escalada en España es preocupante. Madrid y Barcelona deben buscar inmediatamente rebajar la tensión y el diálogo”, ha afirmado Schulz a través de su cuenta en Twitter.
En la misma red social el líder del Partido Laborista británico, Jeremy Corbyn, ha señalado en Twitter que “la violencia policial contra las ciudadanos de Catalunya es impactante”. “El Gobierno español debe actuar y pararla de inmediato”, añade el político británico.
El presidente de los Socialistas y Demócratas en la Eurocámara, Gianni Pitella, ha hecho algo más que distanciarse de la respuesta del Gobierno en este primero de octubre. Ha criticado directamente al presidente, Mariano Rajoy: “La solución sólo puede ser política, no policial, pero durante meses Rajoy ha permanecido en la inacción. La escalada de tensión debería haberse rebajado hace mucho tiempo para evitar el choque entre las fuerzas del orden y la ciudadanía. Las horribles imágenes emitidas en Barcelona a todo el mundo no deberían haber sucedido nunca. Desgraciadamente el Gobierno conservador de España no ha abierto una vía de diálogo y ha desoído la voz de tantos ciudadanos en Cataluña”.
Pitella también ha tenido críticas para el Gobierno de Cataluña “por llevar a la ciudadanía por un camino ilegal a pesar de tantos dictámenes judiciales, no solo del Tribunal Constitucional, sino también de tribunales catalanes”.
Tras conocer parte de estas redacciones, el exministro de Exteriores José Manuel García Margallo admitió este domingo que el Gobierno está perdiendo la batalla de la opinión pública en los organismos internacionales y la prensa europea. En una entrevista en La Sexta defendió la unidad de España, el cumplimiento del Estado de Derecho y la aplicación del artículo 155 para suspender la autonomía de Cataluña si finalmente el Parlament decide aprobar una declaración unilateral de independencia.
Margallo ha recordado que lo sucedido este 1-0 se veía venir y qué el ya advirtió de la radicalización del movimiento tras la Diada de 2010 y la sentencia del Constitucional sobre el Estatut. Margallo ve urgente construir un “relato para difundirlo fuera”.
“Ha habido acontecimientos muy sorprendentes. La declaración de la primera ministra de Escocia [Nicola Sturgeon] simpatizando con el referéndum es la primera vez que se produce. Los escoceses fueron muy cautelosos porque sabían que la posición de España respecto a una eventual adhesión de España a la UE dependía de lo que dijeran ellos. Luego hay una posición de la Iglesia catalana que ha olvidado aquello de 'a Dios lo que es de Dios y a César lo que es del Césa' que el Vaticano no ha condenado o no en los términos que yo creo. Y luego estoy viendo muchos medios internacionales en Francia, Reino Unido, Alemania etcétera, donde el relato de la Generalitat se está imponiendo”.