Albert Rivera necesitaba el calor y el apoyo de los suyos, y lo ha conseguido. Después de cerca de dos duras semanas alejado de los focos mediáticos y con el partido inmerso en su crisis más grave, el líder de Cs ha sido recibido este viernes por los miembros del Consejo General de Ciudadanos, máximo órgano del partido entre Asambleas, con una larga y cerrada ovación.
En su intervención, sin embargo, ha pasado de puntillas sobre la crisis interna, a la que se ha referido de pasada y únicamente para dos cosas. Primero, para reafirmarse en sus decisiones: “Estos días me siento más convencido que nunca de lo que tengo que hacer”, ha dicho. Pero también para advertir a los críticos, sin citarlos, que están en minoría, retándoles a formar un nuevo partido si quieren hacer a Sánchez presidente y que “campe a sus anchas”.
Poco después le respondía en Twitter Toni Roldan, exsecretario de Programas de la Ejecutiva que dimitió el pasado lunes por discrepar con Rivera de su política de pactos. “No hace falta crear un partido, solo hay que sentarse, exigir reformas, regeneración y que no haya pactos con nacionalistas”
Fuentes de la dirección señalaron más tarde que “los titulares son incorrectos” porque el mensaje, en realidad, no iba dirigido a los críticos, sino “a los sindicatos, la patronal y los bancos que le dicen a Rivera lo que tiene que hacer”.
En su discurso ante el máximo órgano del partido, Rivera ha reivindicado a su partido como el único garante de las libertades y de la estabilidad frente al PP, el PSOE o Vox. Y ha afirmado que pese a haber sido el que más ha crecido en las urnas, no pueden gobernar por lo que han optado por estar en la oposición, “firme contra Sánchez pero leal a España”. Una oposición que ha catalogado en tres compartimentos: “la corrupta”, en la que ha enmarcado al PP; “la radical”, en la que ha situado a Vox -sin nombrarlo-, y “la limpia” que, en su opinión, representa Ciudadanos, olvidando que ha pactado con ambos partidos para poder gobernar en comunidades y ayuntamientos. “Algunos ya no son libres, tienen mochilas, tienen casos de corrupción, muertos en el armario. Nuestro mayor capital es la libertad y la falta de tutelas”, ha afirmado.
“Si la única oposición son los que tienen cincuenta y cinco casos de corrupción por resolver, con Bárcenas, Gürtel o Lezo, Sánchez estará una década”, ha advertido después.
Rivera ha desgranado un discurso muy en clave interna para calmar las revueltas aguas del partido, y asegurar a los suyos que solo una formación que esté “unida” puede conseguir la ambiciosa meta de gobernar España. Y ese es el objetivo que cree que va a conseguir Ciudadanos después de haber logrado entrar en gobiernos autonómicos y dirigir “más de 400 alcaldía”. “Estamos cerca de la cima”, ha sentenciado.
“Esto no ha hecho más que empezar estoy rodeado de gente que quiere remar en la misma dirección”, ha dicho en otro momento, comparando al partido con un gran río con afluentes distintos pero que luego confluyen juntos porque tienen “las mismas convicciones”. Y él es, ha recordado, “el presidente de todos” mientras le den apoyo.
“Estos días me siento más convencido que nunca de lo que tengo que hacer porque estamos cerca de la cima, gobernando comunidades y ayuntamientos. Pero ahora queremos gobernar España y para eso necesitamos serenidad y valentía, interés general y sentido de Estado”, ha arengado - y advertido- Rivera a los suyos. “Gobernaremos España, no os quepa ninguna duda”, ha insistido el líder del partido.
En su discurso ante el Consejo General no ha olvidado a Sánchez. “¿Alguién se piensa que nos va a importar lo que digan Pedro Sánchez o sus tentáculos? No, nos preocupan lo que digan mas de 4 millones de votantes”, ha remarcado.
Rivera ha insistido mucho en que no va a cambiar de criterio el día de la investidura de Sánchez al que le ha dedicado sus críticas habituales. “Ahora más que nunca vamos a decir que no”, ha sostenido. Después, ha atacado también a Rodríguez Zapatero por defender que se indulte a “los separatistas”, si son condenados. “Vamos a oponernos a que Zapatero meta la zarpa y pastelee en la Justicia” porque “es una vergüenza”, ha zanjado.
Durante la reunión del Consejo General han intervenido previamente la vicealcaldesa del Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, y el candidato a la Comunidad, Ignacio Aguado, que ha pedido que “no nos tiemblen las piernas” para lograr gobernar en Madrid como antesala a hacerlo en España. “Hemos aguantado carros y carretas y ahora que estamos a punto de cambiar las cosas, a mí no me tiemblan las piernas”, ha sentenciado.