Ciudadanos considera que las críticas a su contabilidad recogidas en el último informe del Tribunal de Cuentas, en el que se hace una fiscalización de los partidos políticos para los ejercicios 2014 y 2015, se deben a una diferencia de “apreciación contable” de determinados conceptos.
Fuentes de la formación naranja han explicado a Europa Press que se trata “simplemente de una cuestión de apreciación contable”, ya que “el Tribunal de Cuentas considera que hay que contabilizar unos recursos cuando se conceden” y en Ciudadanos los contabilizaban “cuando se ingresaban”.
Así ha reaccionado Cs a los resultados del “Informe de fiscalización de los estados contables de los partidos políticos y de las aportaciones percibidas por las fundaciones y demás entidades vinculadas o dependientes de ellos, ejercicios 2014 y 2015”, aprobado por el Pleno del Tribunal de Cuentas el pasado 21 de diciembre y posteriormente remitido al Congreso.
En ese informe, el órgano fiscalizador se niega a dar su conformidad a la contabilidad de 2015 de nueve formaciones políticas, entre ellas Ciudadanos, al detectar demasiadas incidencias, deficiencias y discrepancias que, a su juicio, impiden reflejar adecuadamente la situación financiera y patrimonial del partido.
CIUDADANOS DICE TENER LAS “MANOS LIMPIAS”
El portavoz de Ciudadanos en el Parlamento de Cataluña y miembro de la Ejecutiva del partido, Carlos Carrizosa, ha detallado que lo que ha habido es “una diferencia de criterio en cuanto al momento de declarar las subvenciones”, ya que Cs las registró cuando las recibió, en vez de al devengarlas.
“Me parece una cuestión puramente formal, no de fondo”, ha declarado a laSexta, añadiendo que corregirán todo lo que haya que corregir. Carrizosa ha asegurado que el suyo es un partido “con las manos absolutamente limpias”, con una “imagen de transparencia y pulcritud” y un referente en materia de lucha contra la corrupción.
Según ha manifestado, no es la primera vez que “se utilizan cuestiones puramente formales para hacer ruido” con respecto a las cuentas de Ciudadanos, algo que atribuye al “miedo” que le pueden tener otros partidos.
En este contexto, ha recordado que el PP, que ha pedido explicaciones a Cs sobre sus cuentas, es “uno de los partidos con más corrupción de España” y que tiene pendiente el juicio de la trama Gürtel y los papeles de su extesorero Luis Bárcenas. “No sé si pretende resarcirse del fracaso que les aventura un futuro gris a nivel nacional”, ha comentado, refiriéndose aparentemente a la bajada del PP y la subida de Cs en las encuestas sobre intención de voto.
ERRORES Y DEFICIENCIAS EN LAS CUENTAS DE 2015
Por ejemplo, el partido presidido por Albert Rivera no presentó las contabilidades de los grupos parlamentarios en las Cortes Valencianas, en las Cortes de Castilla y León y en la Asamblea de Extremadura, ni las de los grupos políticos de 574 entidades locales, entre ellas cinco grupos políticos en las diputaciones provinciales; una ausencia de datos que limita el proceso fiscalizador.
Además, el Tribunal de Cuentas señala la “importancia cuantitativa” de una serie de salvedades referentes a la sobrevaloración del activo no corriente, la infravaloración de los gastos y los pasivos en las fianzas de las sedes del partido, errores y omisiones en el registro contable de las entradas y salidas de fondos en la tesorería de los grupos institucionales.
También menciona la no inclusión en el pasivo corriente de las deudas a largo plazo con entidades de crédito, la falta de registro de distintas subvenciones públicas y asignaciones y las deficiencias en los gastos de personal y los gastos de explotación.
Al revisar la coherencia interna de los estados contables, el órgano fiscalizador detectó “numerosas discordancias” entre la documentación justificativa facilitada por Cs y los registros contables, observando omisiones de movimientos de la tesorería, errores en los seguimientos de saldos y pagos a acreedores, así como duplicidades en la contabilización de gastos.
POSIBLES INFRACCIONES
Asimismo, el informe apunta a incumplimientos por parte de Ciudadanos que podrían constituir infracciones recogidas en la Ley Orgánica de Financiación de Partidos Políticos. Concretamente, dice que en 2015 registró como donaciones en especie determinados pagos, por importe acumulado de más de 14.000 euros, efectuados por terceras personas, de facturas electorales emitidas a nombre del partido.
La ley prohíbe que los partidos acepten que, directa o indirectamente, terceras personas asuman de forma efectiva el coste de los gastos que genere su actividad. En relación con dicho importe, Cs no ha identificado a los donantes que han abonado facturas que ascienden a un importe de unos 2.000 euros.
Los partidos pueden presentar alegaciones a las actuaciones fiscalizadoras del Tribunal de Cuentas sobre la contabilidad electoral y presentar la documentación oportuna, pero la formación naranja declinó hacerlo.