Miles de personas se han concentrado este domingo ante ayuntamientos de España “para defender la unidad y la integridad” del país “frente al Gobierno de Pedro Sánchez”. Vox, que tiene 52 diputados en el Congreso, ha salido a mostrar músculo en la calle por primera vez desde que PSOE y Unidas Podemos formaran Gobierno el pasado martes. El líder de la formación de ultraderecha, Santiago Abascal, ha sido el encargado de leer en Madrid un manifiesto que se ha repetido en otras zonas del país para exigir al nuevo Ejecutivo “que respete la soberanía del pueblo español y la Constitución”. En la capital, sin embargo, los convocantes no han conseguido el seguimiento que tuvo otra concentración “por el futuro de la unidad de España” una semana antes.
Una cadena humana de voluntarios jóvenes con chalecos amarillos fluorescentes ha contenido esta mañana a los 4.000 manifestantes, según Delegación de Gobierno, que trataban de acercarse lo más posible al escenario plantado frente al Ayuntamiento de Madrid. Los asistentes, que han llenado la zona alrededor de la glorieta de Cibeles, se han quedado lejos de los 15.000 que una semana antes se reunieron en Colón, según la misma fuente. La concentración de este domingo fue convocada por España Existe, una “plataforma” con página web accesible solo a usuarios con contraseña, y difundida por políticos de Vox en las redes sociales en las últimas semanas.
“Ay, qué nervios”, expresaba una joven que esperaba ver a Abascal en persona. A su alrededor, más jóvenes como ella acudían a una concentración por primera vez. “Queríamos apoyar a nuestro país. Me enteré y como supe que Gloria venía me apunté”, ha contado Paula, una voluntaria de 16 años, que acudió con su amiga motivada “por las políticas” de Vox. “El aborto, los inmigrantes y tal”, ha explicado entre risas nerviosas.
Detrás suyo, se alzaban banderas de España y de la Legión, y carteles que acusaban al actual presidente de “traidor” o clamaban “Sánchez, vete, España no te quiere”. Los presentes coreaban el repertorio de José Manuel Soto y también Amiga mía, de Alejandro Sánz, mientras esperaban la aparición del líder de Vox, que, por “un problemilla técnico” tardó más de media hora en salir.
Alguno se indignaba porque “en la escuela ya no se enseña a hablar español” y otro por que el día anterior miembros de Podemos habían participado en una manifestación en Bilbao por el acercamiento de los presos de ETA a Euskadi; había quien lanzaba insultos y comentarios xenófobos, y también quien acusaba al diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, de “cohecho” por votar ‘sí’ en la investidura; también estaban los que se mantenían en silencio, con la boca abierta, la mirada expectante y la bandera al hombro. Se oían muchos “¡viva España!” y algunos gritos que tuvieron un eco más tímido, como “¡Sánchez Castejón al paredón!”.
La exaltación la venían arengando los líderes de Vox desde las redes sociales. “Estamos preparados para lo peor”, decía Abascal en Twitter después de que Sánchez fuese elegido presidente en el Congreso con 166 votos a favor, 165 en contra y 18 abstenciones hace una semana. Juan José, catalán de 49 años, comparte el pesimismo de su líder: “PSOE, el coleta y los terroristas, ¿te parece poco? Es un cóctel molotov”. No le basta que el candidato del partido más votado el 10-N fuera elegido presidente por la mayoría de diputados del Congreso después de que Felipe VI lo propusiera para la investidura. “Rajoy tendría que haber declarado elecciones en lugar de irse al bar y tendríamos [en el Gobierno] un partido como Dios manda, como el PP o Vox”, se ha quejado.
Tampoco es suficiente para quienes gritaban “¡partido socialista, bando de golpistas!” mientras el escenario improvisado delante de Cibeles tomaba forma y aparecía en el fondo un gran mapa de España con la inscripción “España existe”. El partido de Santiago Abascal tuvo que rectificar esta semana esa imagen porque el cartel que promocionaba la concentración incluía en el territorio a Portugal, lo que provocó las quejas del partido de ultraderecha luso Chega. Subieron fotógrafos y camarógrafos a la tarima para tomar imágenes de los asistentes y el público les lanzó gritos de “fuera” o “televisión manipulación”, consignas frecuentes en los actos del partido de ultraderecha.
Cuando todo estuvo listo, apareció el líder. El público, pese a la espera y el frío, recibió a Abascal con ánimo al grito de “¡presidente, presidente!” cuando saltó al escenario junto a la líder del partido en Madrid, Rocío Monasterio –denunciada por presuntas negligencias profesionales como arquitecta–, y el portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros.
Abascal ha leído un manifiesto que casi en cada línea menciona “España” y ha insistido en el discurso que el partido de ultraderecha repite en cada oportunidad: que “España existe y no es un mito”, que hay que “combatir a los enemigos del orden constitucional”, que el expresident de la Generalitat Carles Puigdemont, huido a Bélgica, es un “golpista”, que “viva España” y que “viva el Rey”. Ha aludido, además,“a los votantes de todos los partidos” y también a los electores de izquierda “porque ellos son los más estafados”. Abascal ha concluido tras una intervención que no ha durado más de ocho minutos: “No hay Gobierno nacional ni entidad supranacional que pueda usurpar lo que pertenece a todos y cada uno de los españoles, su patria”
El líder de Vox se ha limitado a lanzar ese mensaje, se ha hecho algunas fotos que le indicó su jefe de prensa y ha bajado del escenario. Espinosa de los Monteros ha sido el encargado de atender a la prensa y ha trasladado la “preocupación” de su partido por un Gobierno formado por “auténticos enemigos de España”. En línea con lo que se escuchó durante las sesiones del debate de investidura, el portavoz de Vox en el Congreso ha anunciado una oposición “férrea” junto al PP mientras los populares “sigan por el mismo camino” que Vox y sean “exigentes”. La primera muestra del tono que tendrá esta legislatura la han lanzado este domingo desde la calle.
Mientras esto sucedía en Madrid, en Barcelona la convocatoria 'España Existe' coincidía con otra de los CDR, a la que han acudido en torno a 300 personas. Estas han llegado a la plaza de Sant Jaume antes que los simpatizantes de Vox, a los que han recibido con gritos contra el fascismo.
Así, ambos grupos han cruzado insultos y cánticos en contra de los otros e, incluso, los afines a la formación de extrema derecha han llegado a entonar el Cara al Sol. Esto ha llevado a los Mossos a actuar para separar a los asistentes a sendas concentraciones y a tomar medidas para controlar los accesos a la plaza.
Escasa afluencia en el resto del país y pinchazo en Teruel
Aunque los termómetros marcaban siete grados bajo cero a las nueve de la mañana en Teruel, cuando Javier Ortega Smith, secretario general de Vox, ha llegado a las doce a la plaza del Ayuntamiento, la temperatura había ascendido hasta los cinco grados. A pesar de la buena mañana, ni siquiera un centenar de personas esperaba al político en la concentración “España Existe”, que Vox ha convocado frente frente al Ayuntamiento.
Después de sonar las campanas de las doce de la Catedral de Santa María de Mediavilla, Ortega Smith ha comenzado sus declaraciones a los medios de comunicación. “Los más importante hoy es decir que España suma, que España existe y que Teruel existe porque existe España”, ha indicado. Informa Diego Saz. Leer más aquí.
Tampoco ha habido afluencia en Santiago de Compostela, donde alrededor de una veintena de personas ha respondido a la convocatoria de Vox contra el gobierno de Pedro Sánchez. En A Coruña, la afluencia ha rondado el centenar de personas. Informa David Lombao.
En Toledo, unas cien personas se han concentrado en la Plaza del Ayuntamiento, a las puertas del Palacio del Arzobispado, llamados por la convocatoria #EspañaExiste de la ultraderecha. Informa Alicia Avilés.
En el caso de Murcia, unas 300 personas se han reunido el domingo por la mañana frente al Ayuntamiento. Muchas de ellas portaban banderas de España de diversos tamaños. “Queremos una España única y grande”, ha apuntado Antonio, médico en activo de 71 años que ha acudido a la concentración. “Ahora la gente joven no sabe lo que ha pasado en España y por eso no están aquí”, ha añadido Esteban, funcionario jubilado, ante la mayoría de personas mayores que han acudido a la plaza de la Glorieta en esta mañana soleada. “Yo estoy aquí por el Rey” apuntaba Mari Martínez, una ama de casa de 61 años, “porque a ver lo que dura con esta patulea de etarras e independentistas” en el Gobierno“. Sobre las 12.30h los manifestantes han empezado a gritar ”traidor“ y ”embustero“ a Pedro Sánchez sin mucha energía. Sobre esa hora, la diputada nacional de Vox por Murcia Lourdes Méndez ha leído la convocatoria hecha pública en Twitter en la que exigen al ”presidente del Gobierno que, como él mismo prometió, traiga detenido al golpista Puigdemont“. Los manifestantes gritaban ”¡Puigdemont, a prisión!“ enarbolando las banderas. Informa Elisa Reche.
“Es un perro muy tranquilo. Ha sido ponerle la bandera de España y se ha emocionado”. Cuco, con la enseña española en el lomo, es uno más en la concentración en Valladolid. Unas quinientas personas se han manifestado frente a la fachada del Ayuntamiento al grito de 'Viva España, viva el Rey y viva la Constitución' para reclamar una España “que no siente vergüenza de su identidad y no rechaza su épica ni su historia”. Informa Alba Camazón.
En Granada, Sevilla y Málaga, se han producido concentraciones más multitudinarias, que han reunido unas 1.500, 2.000 y 2.000 personas respectivamente. La comunidad andaluza fue la primera donde Vox penetró en las instituciones, convirtiéndose en sostén del primer Gobierno autonómico de PP y Ciudadanos. En las pasadas elecciones generales, Vox también logró en Andalucía un porcentaje superior a sus resultados en el conjunto del país: un 20,39% del escrutinio (12 diputados), convirtiéndose en la tercera fuerza más votada, por delante de Podemos y Ciudadanos. Informa Dani Cela.