Madrid, 27 jun (EFE).- El cannabis medicinal podría ser una realidad antes de que acabe el año, cuando el Congreso ha emplazado al Gobierno a encontrar un “encaje” normativo a los nuevos medicamentos, que se dispensarán siempre con receta médica y preferentemente farmacias hospitalarias.
La Comisión de Sanidad y Consumo del Congreso ha aprobado definitivamente este lunes el dictamen en el que el Gobierno deberá basarse ahora para regularizar el cannabis medicinal como complemento terapéutico para calmar el dolor de algunas patologías que salió la semana pasada de la subcomisión creada al efecto en esta Cámara.
El documento, una batería de recomendaciones que supondrán el inicio del uso terapéutico del cannabis en nuestro país, ha salido adelante con el mismo resultado: los 20 apoyos del PSOE, Unidas Podemos, Ciudadanos, PdeCAT, y PNV, las 2 abstenciones de ERC y EH Bildu y los 14 rechazos de los diputados de PP y Vox.
La mayoría de diputados ha rechazado elevarlo a pleno; tampoco han prosperado ninguno de los votos particulares que han presentado todos los grupos menos PSOE y PNV.
AHORA, EN MANOS DE LA AEMPS
De esta forma, el siguiente paso es remitir el texto tal y como lo aprobó la subcomisión la semana pasada a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) para que empiece cuanto antes los trabajos necesarios para que los medicamentos con productos derivados del cannabis puedan ser una realidad en España a final de año.
Así lo establecía el informe: “En un plazo de 6 meses desde la aprobación de este Informe por la comisión de Sanidad y Consumo del Congreso, la AEMPS realizará los trabajos necesarios para que las citadas recomendaciones tengan encaje en la normativa y sean viables, permitiendo la disponibilidad en el mercado farmacéutico de extractos o preparados estandarizados del cannabis”.
“Hoy hacemos un ejercicio de humanidad con esos pacientes y estoy convencidísimo de que el Gobierno lo pondrá en marcha en el tiempo que hemos acordado”, ha garantizado el diputado socialista Daniel Viondi, encargado de elaborar la propuesta inicial que se ha ido engrosando estas semanas con las aportaciones del resto de grupos.
PARA QUÉ PACIENTES
Tal y como estableció la subcomisión tras escuchar a 23 expertos nacionales e internacionales sobre el cannabis medicinal, esos pacientes serán los que sufren dolor crónico -también el neuropático-, dolor oncológico, endometriosis, la espasticidad de la esclerosis múltiple, algunas formas de epilepsia y las náuseas y vómitos derivados de la quimioterapia, con la posibilidad, añade, de ampliarse “a otras indicaciones terapéuticas cuando los estudios aporten indicios consistentes”.
El dictamen del Congreso abre la puerta a que se dispense en farmacias comunitarias, como querían UP, Cs o PNV: “La dispensación de fórmulas magistrales con extractos o preparados estandarizados de cannabis ha de realizarse a partir de la red de farmacias del sistema de salud, con preferencia en las farmacias hospitalarias y explorando la alternativa de las farmacias comunitarias que puedan reunir los requisitos”.
Los nuevos medicamentos serán prescritos “exclusivamente por profesionales sanitarios”, preferentemente por los especialistas que atienden las áreas para las que se va a indicar el cannabis medicinal, a los que habrá que formar en el uso terapéutico del cannabis.
UNIDAS PODEMOS, ERC Y EH BILDU INSISTEN CON EL AUTOCULTIVO
“Nos hubiera gustado llegar más lejos”, ha dicho el portavoz del grupo vasco, impulsor de la creación de la subcomisión que ha supuesto el arranque del uso terapéutico del cannabis; aun así, el PNV cree que es “un buen paso en la buena dirección que, con el tiempo, se irá mejorando”.
Juan Ignacio López-Bas, de Ciudadanos, ha opinado que es “un informe de mínimos que no da ningún paso adelante” y, aunque ha decidido darle su apoyo, desde su grupo piensan que hay que avanzar también en regularizar esta sustancia con fines recreativos.
De la misma manera, Unidas Podemos ha confiado en que “otras dimensiones (del cannabis) que hay que abordar” se afronten cuando presenten su ley y se pueda “tener un enfoque integral sobre esta problemática”, ha defendido su representante Lucía Muñoz.
Unidas Podemos logró introducir en el dictamen final una alusión a las flores del cannabis, que no mencionaba la propuesta inicial del PSOE, que se limitaba a los extractos y preparados de administración por vía oral y no inhalada como los cogollos.
Así, el dictamen incorpora la posibilidad de valorar las sumidades floridas (la flor del cannabis) o “preparados de otro tipo que estén disponibles en países de la UE” para desarrollar proyectos experimentales “cuando sean solicitados”.
También ERC aspira a una “regulación integral del cannabis”, en palabras de su diputada María Carvalho, mientras que EH Bildu ha reiterado la necesidad de crear una Agencia del Cannabis para la coordinación de todo lo relacionado con esta sustancia.
PARA EL PP, LA EVIDENCIA ES INSUFICIENTE
Por el contrario, el PP ha rechazado el dictamen por considerar que es la AEMPS, y no el Parlamento, la que debe marcar las directrices y definir los mecanismos de la prescripción y dispensación de fármacos derivados de cannabis, sobre el que además la evidencia científica disponible es “insuficiente”.
“Solo la investigación aportará luz para dilucidar lo que en el futuro se pueda hacer con los cannabinoides”, ha resaltado la portavoz popular en la Comisión, Elvira Velasco.
Vox va más allá y está convencido de que esta regulación será un “caballo de Troya” para el uso recreativo, ha reiterado Juan Luis Steegman. “No hay una auténtica demanda social, hay solo una demanda política de la izquierda en convertir España en un narcoestado”, ha censurado.