El libro Conociendo el Congreso de los Diputados que la institución entrega a los visitantes durante las jornadas de puertas abiertas parte de una premisa absolutamente irreal: una diputada que lleva 35 años en su escaño lo abandona tras su nombramiento como ministra. Esta es una situación que nunca se ha producido en la democracia, más bien suele ser al revés: los ministros salientes se quedan en la Cámara Baja.
No es un buen comienzo. La historia se inicia con la presentación de los dos protagonistas: la diputada longeva recibe a un diputado joven e inexperto que la sustituye tras su ascenso. Pilar se encuentra con David a las puertas del Congreso y juntos cruzan el control de metales, pero “una imagen borrosa” mientras pasa el novato llama la atención de los miembros de seguridad que se “disculpan” ante la “confusión” cuando son alertados por la diputada experta.
Una vez dentro, la diputada saliente enseña a su sucesor todo lo que tiene que saber, como que mesa y Mesa no son lo mismo y que la segunda es el órgano de gobierno del Congreso, una aclaración inexplicable teniendo en cuenta que la página anterior deja claro que el nuevo “ha preparado bien su trabajo estudiando la configuración de todos los órganos y las funciones del Congreso y las necesidades que le plantean los ciudadanos”.
Las ilustraciones de la autora de Las tres mellizas muestran realidades de la vida política. Una de ellas es la huida de los políticos ante los canutazos de los periodistas: “A David no le da tiempo a ni a entenderlo, ni a reaccionar, cuando, de repente, es engullido por un alud de periodistas que se apresuran a acercar sus micrófonos a los portavoces de los grupos parlamentarios”.
También es muy representativa la imagen de los parlamentarios vitoreando al portavoz de su grupo frente al aburrimiento de los contrarios, que aparecen retratados con semblante serio e incluso charlando con el diputado de al lado. Ese es el dibujo elegido para ilustrar el momento en el que el nuevo representante aprende el procedimiento de trabajo: “Los turnos de palabra, la cortesía parlamentaria y todo ese mundo del debate parlamentario”. “El pueblo es el fundamento de la democracia” y “la democracia supone adoptar los acuerdos por mayoría y el respeto a las minorías” son las obviedades de los discursos reflejados en el librillo.
“David se siente abrumado por la relevancia de la historia y, sobre todo, por la actividad legislativa y la responsabilidad que tiene como Diputado: hacer leyes”, narra el texto, que no escatima en detalles para mostrar la ingente cantidad de trabajo de los parlamentarios, que les ocupa incluso los fines de semana: “Es sábado, y David acompaña a un grupo de electores de su provincia a visitar el Congreso y les explica las diferentes salas y el Hemiciclo, donde se ubica la Mesa, cada Diputado y los Grupos Parlamentarios y el Gobierno en el banco azul”, mientras los visitantes miran como bobos hacia el techo los disparos de balas del 23F.
A lo largo del cómic no faltan los apuntes superficiales, como el hecho de que David se ha puesto “sus mejores galas” dada la importancia de la celebración del 35º aniversario de la Constitución, la alusión a la polvera que “viaja en el bolso” de la diputada para diferenciarlo del sinónimo en el que se guardan las constituciones históricas o la brecha generacional que lleva a los diputados mayores a utilizar agendas de papel frente a la juventud con sus modernas agendas electrónicas. En el mundo real, todos ellos reciben un iPad y un ordenador portátil cuando toman posesión de su cargo.
“Pilar en el Salón de Pasos Perdidos hace cuatro operaciones rápidas para calcular los kilómetros recorridos en estos años cada semana desde su provincia a Madrid y viceversa”, dice el cuento, que omite algunos datos como que los diputados cobran un extra para sufragar su vivienda en la capital o privilegios en transporte para sus desplazamientos.
El buen rollo entre los grupos parlamentarios también aparece retratado: “Coincidiendo con la despedida de Pilar, David y un grupo de Diputados, de diferentes Grupos Parlamentarios, le han organizado una despedida. ¡Ella se siente abrumada y feliz! (sic)”. “Han pasado unas semanas desde que se conocieron, cuando Pilar pensó que David era muy joven, y él creía saberlo todo. Durante esos días ella le ha transmitido los secretos de su cargo y con el relevo empiezan por separado una nueva etapa, pero unidos por el compañerismo y el sentimiento de la importancia del servicio público y la responsabilidad de representar a los ciudadanos”, concluye la historia.
El librillo incluye un glosario con vocabulario y definiciones sobre los órganos que integran la Cámara Baja, así como explicaciones sobre su funcionamiento: “Los diputados cada vez más usan medios informáticos, de hecho las convocatorias se envían por sms y muchos documentos por e-mail u otros sistemas electrónicos”.
“Todas las actividades de la Cámara son públicas y de ellas se informa en la Web, conforme al principio de transparencia”, dice el glosario. No obstante, la publicación de este librillo está sujeta a copyright por lo que está prohibida su reproducción o transmisión “por ningún medio sin el permiso previo y por escrito de los editores”.