La Mesa del Congreso ha vuelto a dar largas a la inauguración del Portal de la Transparencia que la Cámara tenía que haber abierto hace más de un mes para cumplir con la ley, aprobada a finales del mes de diciembre. El presidente, Jesús Posada, ha declarado a la salida de la reunión de este órgano que espera que “todos los aspectos más importantes” puedan estar cerrados “en un mes o mes y medio” para que el portal sea una realidad “antes de Semana Santa”. “He dado instrucciones para que este asunto se trate con rapidez, pero sin apresuramiento”, ha añadido Posada.
A pesar de este nuevo retraso, el Congreso, en una nota de prensa distribuida después de la reunion de la Mesa y de la Junta de Portavoces, da por cerrado el acuerdo y afirma que “han sido aprobadas las normas para la aplicación de la ley de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno a la Cámara, en relación con su actividad sujeta a derecho administrativo, así como los contenidos del portal de la transparencia, que estará disponible en breve”.
Según la nota, en el portal se incluirá “el presupuesto tanto del Congreso como de las Cortes Generales, información sobre la ejecución presupuestaria y los convenios en vigor suscritos por la Cámara”. También podrá conocerse “la relación de los contratos menores que se formalicen, completando de esta manera la información del perfil del contratante, en el que ya se publicaban los procedimientos de contratación de mayor cuantía”.
Otra de las novedades será la publicación del organigrama “detallado” de la Secretaría General, el régimen económico de los cargos nombrados por la Mesa, así como el régimen de incompatibilidades del personal al servicio de la Cámara.
Sin embargo, no se subirán a la web las nóminas de sus señorías. La información sobre los sueldos seguirán en el apartado de “régimen económico” de los diputados, que ya figura en la web. Si el ciudadano quiere conocer la cuantía total del salario de los diputados tendrá que ir sumando cantidades en función de sus cargos.
En el portal sí habrá un listado de los bienes del Congreso, “tanto muebles como inmuebles, con una especial referencia al patrimonio histórico-artístico, bibliográfico y documental existente”.
La Mesa tiene que concretar asimismo el procedimiento que se utilizará para que los ciudadanos puedan solicitar la información que crean de su interés, sin obligación de explicar sus motivaciones. El Congreso tendrá un mes de plazo para responder a estas preguntas. En caso de inadmisión los ciudadanos afectados podrán interponer un recurso.
Aunque Posada parece satisfecho, algunos portavoces como José Luis Centella, de la Izquierda Plural, consideran que la Mesa se ha quedado “corta” y se ha perdido una oportunidad de “acercar la calle al Parlamento” al no incluir en el portal “unos mínimos para recuperar credibilidad y cercanía”.
En opinión de Centella, el Congreso debería hacer un esfuerzo para alcalzar el listón que hay en otros países de la Unión Europea y que la información vaya “más allá de los aspectos administrativos” para que el ciudadano “sepa que hay detrás de las leyes y qué es lo que motiva su presentación”.