El expresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) Manuel Conthe ha asegurado hoy en el juicio que se sigue por la presunta estafa de Fórum Filatélico que el que debió impedir a la empresa realizar su actividad fue el Banco de España.
Conthe, que estuvo al frente de la CNMV entre octubre de 2004 y mayo de 2007 -Fórum fue intervenida en mayo de 2006- ha querido dejar claro que el supervisor bursátil no hizo dejación de funciones, y que correspondía en todo caso al Banco de España decidir si Fórum podía o no llevar a cabo su actividad porque “la captación de fondos se parecía más a un depósito bancario que a un activo financiero”.
Que Fórum Filatélico estaba haciendo captación de ahorro público “era evidente”, ha explicado, de lo que se trataba era de ver “cuál era el régimen jurídico aplicable”; hasta 2003, ese tipo de actividad la debía autorizar uno de los tres supervisores -CNMV, Banco de España o Dirección General de Seguros-“.
Pero a partir de noviembre de 2003, “el legislador, en una operación muy torpe y muy criticable”, trasladó esa responsabilidad a las autoridades autonómicas de consumo.
Por eso, la CNMV no tenía competencia alguna sobre Fórum Filatélico, ha relatado; el organismo lleva a cabo un trabajo “estrechísimo” de supervisión de las entidades que están bajo su competencia, y también advierte de los casos en los que entidades desarrollan servicios de inversión sin estar autorizadas, lo que se conoce como “chiringuitos financieros”.
Pero Fórum Filatélico no estaba incluida en ese grupo, aunque ha reconocido que responsables de la sociedad se pusieron en contacto con la CNMV para ver si podían ser supervisados, algo que nunca ocurrió.
Tampoco descarta que Fórum se planteara en alguna ocasión convertirse en agencia o sociedad de valores, con lo que sí hubiera podido ser supervisada por la CNMV; lo crucial era cómo se realizaba la captación de fondos, que era de carácter reembolsable dado el pacto de recompra, con lo que escapaba a la actividad de los mercados.
En Fórum “había una situación de ilegalidad clara que deberían haber tratado de resolver los directivos de la filatélica, los supervisores y el Ministerio de Economía y Hacienda” a fin de regularizar su actividad.
En opinión de Conthe, “llegaron a la peor de las soluciones posibles” tras un cambio normativo “lamentable” que “logró que la presión que había sobre Fórum y Afinsa quedara paralizada y dio, desgraciadamente, tres años adicionales para que la pirámide siguiera creciendo hasta que se produjo la intervención” en mayo de 2006.