Correos ha abierto expediente a la empresa subcontratada responsable de la calificación y escaneo de la correspondencia y ha solicitado la “retirada inmediata” del servicio del vigilante de seguridad que no detectó en el escáner las tres cartas con amenazas, que contenían munición de diferente calibre sin percutir, dirigidas al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; a la directora de la Guardia Civil, María Gámez; y al candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Pablo Iglesias.
En un escrito al que ha tenido acceso Europa Press, la compañía señala que ha recuperado las imágenes grabadas en sus equipos de inspección, instalados en el Centro de Tratamiento Automatizado de Madrid (Vallecas), y que se ha comprobado que los tres sobres anteriormente citados fueron matasellados e inspeccionados el día 19 a las 17.48 horas, sin que el operador de servicio fuera capaz de detectarlos.
Ante una circunstancia que se encuentra tipificada como un “incumplimiento muy grave”, Correos ha decidido abrir un expediente a la empresa encargada de escanear la correspondencia.
La empresa ha notificado la apertura del mencionado expediente y apercibimiento “más severo”, por el incumplimiento en el que se ha incurrido y por “el daño a la imagen, al prestigio y al buen nombre” de Correos.
Asimismo, ha solicitado la retirada “inmediata” del servicio de Correos del vigilante de seguridad por ser la persona que operaba el equipo reseñado, en el momento en el que las tres misivas pasaron por la inspección radiológica que determinan los procedimientos de seguridad de Correos, “sin que fuera capaz de identificar los proyectiles que portaban”.
El sindicato niega que sea un fallo humano
Por su parte, el sindicato de seguridad privada Alternativa Sindical ha puesto en duda que “se pueda tratar de un error” del vigilante de seguridad. Su portavoz, Alberto García, ha señalado que las máquinas de Rx “tienen un sistema de detección automática, como en el aeropuerto”. Así, ha asegurado que si esa máquina “no detecta nada raro, no pasa a la inspección del vigilante”.
“Si raro es que falle este sistema, más raro aún es que pase con no uno, sino tres sobres que portan objetos metálicos. Además Correos cuenta con otros sistemas de seguridad en los sobres para discriminar cartas de paquetería”, ha explicado.
Por ello, el sindicato ha exigido a Correos y al jefe de seguridad “que ha responsabilizado al vigilante” que investigue las causas que supuestamente han llevado a concluir que ha sido error del vigilante de seguridad y no del buen funcionamiento o calidad de sus propios sistemas de escáneres automatizados.
UGT pide al Gobierno “un análisis en mayor profundidad”
Mientras, UGT ha pedido al Gobierno “un análisis en mayor profundidad” antes de “culpabilizar al vigilante que presuntamente no detectó los sobres” con balas en el escáner. “Intentar inculpar la actuación de un vigilante solo sirve para no abordar con rigor la búsqueda de soluciones reales a la problemática de la seguridad privada en nuestro país”, afirma el sindicato en un comunicado.
“Además de la investigación abierta que determinará si la actuación del vigilante fue correcta o no”, UGT solicita que Correos revise sus protocolos de actuación en materia de seguridad tanto en los pliegos de contratación, como en la adjudicación de los servicios y durante la ejecución de los contratos.
El sindicato urge a cambiar el modelo de contratación pública, ya que se trata de “un modelo basado en la oferta económica más baja que normalmente deja sin efecto la tan necesaria calidad de los servicios de seguridad que viene realizándose en dependencias tan vitales como la dispuesta en Correos y otras instalaciones estratégicas” de España.
Aunque el sindicato considera que “algunas empresas de seguridad privada son culpables por concurrir a ese tipo de licitaciones a la baja”, ello “no debe seguir siendo la excusa para que los distintos Gobiernos de este país sigan sin abordar un urgente cambio de modelo en este tipo de contratos”.
UGT ha condenado las amenazas sufridas por los tres miembros del Ejecutivo que recibieron los sobres con munición. “Es inadmisible y más si cabe, ante una situación como la que acontece en nuestro país en plena crisis sanitaria y económica sin precedentes, encontrar una clase política que abandona los problemas de las personas para crispar desde el populismo más radical la convivencia en nuestra sociedad”, ha expresado el sindicato.