“Ha quedado claro que las cárceles en España, y en particular a la que se va a enviar al señor Puigdemont cuando venga, reúne todas las comodidades que, no ya solo los presos, sino que muchas personas quisieran disfrutar”, ha dicho.
No obstante, el ministro ha matizado posteriormente, a través de un portavoz, que lo que ha querido decir es que “las prisiones españolas tienen unos estándares de respeto de los derechos fundamentales y de confort de los más altos de Europa y del mundo”, pero no, obviamente, que nadie pueda desear ir a prisión.
Dastis ha sido preguntado en una rueda de prensa junto a su homólogo saudí, Adel al Jubeir, por el hecho de que la Fiscalía belga haya preguntado al Ministerio del Interior por las condiciones de las prisiones españolas.
Así ha sido en el marco del proceso judicial que se sigue en este país para decidir si se responde afirmativamente a la euroorden enviada por la Audiencia Nacional contra Puigdemont y los exconsellers que le acompañan en Bélgica.
El ministro se ha mostrado convencido de que Bélgica no le dará a Puigdemont un trato privilegiado y no ha querido dar una interpretación al hecho de que la Fiscalía belga haya dirigido esas preguntas a España. De hecho, se ha limitado a enmarcarlas en un proceso judicial que, confía en que termine con la entrega de Puigdemont a España.
“Es en ese contexto en el que hay que colocar o interpretar cualquier averiguación que facilite el resultado final, que entendemos que va a ser el desplazamiento del señor Puigdemont a España”, ha concluido.