El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha impuesto una fianza de 300.000 euros a Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol encarcelado desde el pasado 20 de julio por la Operación Soule. El magistrado entiende que ya no puede influir en la investigación abierta contra él.
Si reúne esa cantidad y sale de prisión, Villar tendrá que comparecer semanalmente ante el juzgado y se le retirará el pasaporte.
Villar lleva 11 días en prisión. Tras declarar ante Pedraz, el juez le envió a prisión sin fianza junto a su hijo Gorka por crear un “entramado” para enriquecerse con fondos públicos y privados de la RFEF. El juez también acuerda una fianza para Gorka Villar, que tendrá que abonar 150.000 euros para salir de prisión.
El auto de Pedraz también afecta al tercer encarcelado por este causa, el vicepresidente económico de la RFEF. Al igual que Villar, deberá abonar 300.000 euros para salir en libertad. A él y a Gorka Villar se les aplicarán las mismas medidas cautelares que a Villar.
El juez señala que siguen existiendo motivos para estimar responsables criminalmente de los delitos Villar, a su hijo Gorka y a Padrón, resulta oportuno modificar la situación personal de los tres. El argumento es que las diligencias que se han practicado junto a los embargos y el bloqueo de sus cuentas hacen que “difícilmente puedan obstaculizar la instrucción de la causa”.