El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 5 de Córdoba ha desestimado un recurso del propietario de la vaquería --declarada ilegal por sentencia firme en 2009, en la localidad cordobesa de Fuente Palmera-- contra el Ayuntamiento colono por los supuestos daños sufridos en la explotación ganadera, desde el 3 al 22 de diciembre del año 2010, con una reclamación de unos 150.000 euros, tras el auto de entrada en el recinto concedido a la administración local.
En la resolución judicial, a la que ha tenido acceso Europa Press, el vaquero alegaba daños por enfermedades del ganado en los citados días, si bien el juez detalla que se trata de “una actividad mercantil, que se ejecuta a riesgo y ventura del que la ejerce” y no queda acreditado el daño.
En el recurso “se imputa el daño a una mala praxis y gestión” por el Consistorio local, una afirmación que, a juicio del magistrado, “se encuentra huérfana de toda prueba”, pues “los informes periciales en los que funda su reclamación no imputan los daños a un trato inadecuado del ganado o a un negligente actuar de los cuidadores del mismo”, sino que “se limitan a afirmar que existen animales a los que se ha prescrito sacrificio debido a procesos infecciosos que han padecido”, entre otros. Y apunta que, aún cuando el vaquero hubiese sido el encargado del cuidado de los animales en dichas fechas, “los procesos infecciosos se hubiesen producido de igual forma”.
Además, el togado recuerda que el vaquero ha explotado la actividad ganadera “desde hace muchos años sin contar con las autorizaciones preceptivas, cuestión que nunca es baladí”, a lo que añade que “las diferentes órdenes de cese de la actividad han sido sistemáticamente obviadas” por el propietario, quien “no ha permitido la ejecución forzosa por el Ayuntamiento”, lo que conllevó a la imposición de multas coercitivas y la autorización de entrada en la explotación.
Así, el juez concluye que la conducta del vaquero, “obstruccionista, dilatoria y frontalmente opuesta al cumplimiento de las disposiciones administrativas firmes”, ha sido “la única que ha propiciado que la administración tuviera que asumir el cuidado de los animales”, por lo que “los hipotéticos daños que reclama debe asumirlos” el vaquero, dado que la actuación del Consistorio ha sido “extraordinariamente cauta y cuidadosa, para evitar cualquier sufrimiento a los animales”.
“EJEMPLAR EJECUCIÓN”
Entretanto, el vecino afectado por las instalaciones, Francisco Adame, valora esta resolución judicial, en la que, como destaca, “el Juzgado califica al Ayuntamiento de ejemplar en la ejecución del procedimiento de cierre”, que “una vez más se ratifica”, de manera que “se confirma” la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) del 18 de julio del 2009, que declaraba ilegal la vaquería.
Igualmente, Adame ha informado a Europa Press de que a instancia suya el Ayuntamiento se está planteando “iniciar las multas coercitivas, si no cumplía los plazos marcados en el pleno de marzo del año 2012, es decir 21.000 euros semanales”.
Al respecto, los grupos municipales ya se han mostrado favorables a la ejecución de las obras en la nueva parcela para la vaquería en un pleno celebrado en noviembre de 2012 y en el que se aprobó por unanimidad una propuesta con la que se da el visto bueno al proyecto de actuación en suelo no urbanizable para la actividad de explotación de ganado vacuno, situado en una parcela del polígono 4 del término colono, en un terreno ubicado entre Fuente Palmera y la aldea de La Ventilla.
En relación a la sesión extraordinaria-urgente celebrada en marzo de 2012, se aprobó la declaración de utilidad pública e interés social del mencionado proyecto de actuación en suelo no urbanizable; el 18 de octubre dicho proyecto fue admitido a trámite, y el 25 de octubre, el Servicio de Urbanismo de la Delegación de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta en Córdoba emitió un informe favorable a la aprobación de dicho proyecto.
CONDENAS AL VAQUERO
Entretanto, y después de haberse sentado ya varias veces el vaquero en el banquillo de los acusados por distintas causas relacionadas con el cierre, el afectado indica que “puede llegar el momento en el que vaya a la cárcel, por acumular penas”, pues recuerda que ya fue condenado a siete meses de prisión por un delito de desobediencia grave a la autoridad, cometido al no cumplir en 2009 la orden del Ayuntamiento para que cerrara la explotación.
Igualmente, el propietario de la vaquería ha sido condenado a pagar un total de 2.400 euros a la administración pública por cuatro multas coercitivas después de no cesar la actividad de manera voluntaria en el recinto ganadero.
ORIGEN EN 1992
En su protesta por el “incumplimiento” del vaquero y la administración de la sentencia del TSJA de 2009, Adame se ha manifestado ante las puertas de la Fiscalía cordobesa y se ha encerrado en el Consistorio de Fuente Palmera en varias ocasiones. Además, presentó una denuncia ante la Guardia Civil porque el 30 de junio de 2011 expiraba el plazo de cierre establecido en un acuerdo entre el Ayuntamiento y el vaquero, e igualmente no se produjo.
Desde el verano de 1992, relata que ha tenido que soportar junto a su familia “los daños y perjuicios que suponen tener una explotación ganadera ilegal” junto a su vivienda, situación que “ha sido tolerada por el Ayuntamiento”, convirtiéndose de ese modo en “corresponsable”.