La Policía tailandesa detuvo a un preso alemán que escapó hace dos semanas de sus guardias cuando estaba bajo custodia en el aeropuerto de Suvarnabhumi en Bangkok, informó hoy la prensa local.
El alemán Carlo Konstantin Kohl, de 25 años, fue arrestado ayer cerca de la embajada de su país donde había tratado de pedir un pasaporte temporal, señaló el jefe de la Oficina de la Policía de Inmigración, Panu Kerdlarppol.
“Nunca había estado en Bangkok antes. Ya dije en su momento que lo cogeríamos pronto ya que no tenía ni pasaporte, dinero o alguien para ayudarle a escapar. Finalmente ha salido de su escondite y lo hemos apresado”, apuntó Panu.
Khol llegó a Bangkok el 15 de mayo en un vuelo procedente de Australia, donde había cumplido dos años y cinco meses de cárcel por robar joyas y tráfico de drogas.
Esa noche debía abordar un avión con destino a Alemania, donde al parecer tiene varias cuentas pendientes con la justicia, pero retrasaron el vuelo hasta la mañana del 16, lo que aprovechó para escabullirse.
El alemán aprovechó un descuido de los guardias que lo custodiaban para esconderse durante horas en el aeropuerto y luego cortó la electricidad en una puerta de emergencia, lo que le permitió huir sin levantar las alarmas.
Los medios informaron de que los guardias, empleados de una empresa de seguridad privada, se quedaron dormidos, aunque otras fuentes indican que el reo huyó aprovechando un permiso para ducharse.
Las autoridades tailandesas, que aseguran que no fueron informadas de que el detenido se encontraba en Bangkok, tardaron varios días en averiguar cómo escapó el sospechoso y casi dos semanas en hacer público el incidente.
Según el diario “Bangkok Post”, Khol tenía unos 100 dólares en el bolsillo que pagó a un taxi para llevarle a un lugar indeterminado de la capital, donde entró en contacto con los empleados de un restaurante alemán.
Les pidió un número de cuenta bancaria donde un familiar le transfirió 15.000 bat (497 dólares o 381 euros) y permaneció escondido varios días hasta que se decidió a ir a pedir un pasaporte a la Embajada alemana y fue detenido.
El jefe de la Policía de Inmigración afirmó que Khol ha sido multado con 6.000 bat (unos 199 dólares o 150 euros) por entrar ilegalmente en el país y está pendiente de su extradición a Alemania.