El gobierno estadounidense se mostró hoy “optimista” sobre el cierre del acuerdo comercial Transpacífico (TPP), de EE.UU. con doce países de la región, que podría darse “en primavera”; mientras que señaló que las negociaciones con la Unión Europea (UE) aún necesitan más recorrido.
“Somos optimistas sobre el TPP, creemos que podríamos tener un acuerdo en el futuro próximo, tan pronto como esta primavera”, aseguró Cathy Novelli, subsecretaria de Estado para el Crecimiento Económico y la Energía, en una conferencia en el National Press Building de Washington.
La funcionaria estadounidense, que supervisa las negociaciones comerciales para el Departamento de Estado, se mostró más cautelosa respecto al Acuerdo de Libre Comercio e Inversiones (TTIP) que Estados Unidos negocia con la Unión Europea (UE).
“Es un acuerdo más nuevo, no es que está detrás en las prioridades sino que empezó más tarde”, afirmó sobre las negociaciones con la UE, que comenzaron en 2013.
Novelli precisó que “es posible” que se llegue a un acuerdo con la UE antes de que el presidente Barack Obama deje la Casa Blanca a comienzos de 2017, y subrayó el “ímpetu” dado por la nueva Comisión Europea (CE), encabezada por Jean Claude Juncker.
En este sentido, aseguró que ambos ambiciosos tratados son elementos “clave” de la agenda presidencial en los dos años que le quedan a Obama como presidente, pero remarcó que para que avancen es muy importante que el Congreso de EE.UU. apruebe la legislación que otorgue al Gobierno autoridad comercial para promulgar los tratados actualmente en negociaciones.
Esta norma, conocida como TPA en inglés, permitiría que los acuerdos negociados por la Administración del presidente Obama sean sometidos a voto integral, sin posibilidad de enmiendas por parte del legislativo.
Aunque los republicanos controlan ahora las dos cámaras del Congreso tras la victoria en las legislativas de noviembre pasado, la cuestión comercial es uno de los puntos en común entre la Administración demócrata de Obama y la oposición republicana.
El acuerdo del TPP, cuyas negociaciones comenzaron en 2008, concentraría a doce economías con salida al océano Pacífico y ha sido remarcado como una señal de la importancia de la región Asia-Pacífico, que cubre el 40 por ciento de la economía mundial.
Los países integrantes del TPP son, además de EE.UU., Australia, Brunei, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam.
Por su parte, el acuerdo comercial EEUU- UE supondría la mayor zona de libre comercio global, y representaría el 50 % de la actividad económica mundial y el 30 % del comercio global.
Según un estudio de la Cámara de Comercio de EEUU, el tratado añadiría 120.000 millones de dólares a los 650.000 millones anuales que en la actualidad genera el comercio bilateral.