Nueva York, 5 nov (EFE)-. La vida en El Barrio, el tradicional vecindario puertorriqueño de Nueva York, transcurría este martes con normalidad con negocios abiertos y casi vacíos como sus calles, contrario a centros de votación donde no se detenía el flujo de electores, un gran número de ellos 'boricuas' que, al emitir su sufragio, no olvidaron el insulto a su país que hizo un partidario republicano en un mitin el pasado 27 de octubre.
“Eso me ofendió, eso no se dice”, dijo a EFE Juan, de 67 años, acompañado por su hermano William, de 68, que, en silla de ruedas y con problemas para hablar, movía su cabeza dándole la razón. (se referían al calificativo de Puerto Rico como “isla flotante de basura” que pronunció un cómico 'telonero' en un mitin de Trump en Nueva York).
Ambos nacieron en Puerto Rico y hoy votaron por la candidata demócrata a la presidencia, Kamala Harris, como muchos otros residentes de El Barrio, donde no se esperan sorpresas con los resultados, al menos allí.
No obstante, electores entrevistados por EFE manifestaron su preocupación por los resultados generales del país ante una contienda electoral frente al republicano Donald Trump, que se ha caracterizado por sus márgenes muy estrechos.
Estas fueron las segundas elecciones como ciudadana para la mexicana Maricruz Eduardo, quien dijo a la salida del centro de votación que apoyó a Harris porque cree en el poder de las mujeres. “Yo soy una de ellas” -dijo- al criar sola a cuatro hijos en Nueva York, con los que emigró sólo con un peso mexicano “que me dieron cuando iba a venir”.
Eduardo dijo estar molesta con los comentarios hechos por Trump contra los inmigrantes porque, recordó, ella trabajó duro para sacar adelante sus hijos como costurera y luego como cuidadora en el hogar. “¡Quiero que las mujeres ganemos!”, afirmó.
Los comicios presidenciales en centros visitados por EFE en El Bronx y Harlem han atraído un gran número de personas, que solos o acompañados por familiares, en silla de ruedas o con bastones, acudieron temprano a emitir su sufragio.
“Ha venido mucha gente, incluso gente que no había votado antes” aunque están registrados para votar, comentó una trabajadora de El Bronx.
En El Barrio no era distinto. Allí votó también el congresista Adriano Espaillat, que acudió junto a una delegación de legisladores dominicanos a quienes invitó a observar el proceso en el distrito que representa y que incluye Harlem.
“Me ha sorprendido el nivel de voto hoy porque ya muchos votaron temprano. Los hispanos han salido a votar en grandes números”, dijo, y aseguró que al concluir la elección “habrá sorpresas”.
Se manifestó “optimista” de que en los siete estados 'bisagra', que son clave para los resultados, se terminen inclinando por Harris.
La candidatura de Trump provoca pasiones entre sus seguidores y ha dividido incluso a familias, aseguró a EFE una activista comunitaria del Harlem hispano, quien se mostró indignada por los comentarios del humorista republicano que llamó a Puerto Rico “isla de basura” y que no puede entender “cómo un puertorriqueño puede votar a Trump.
Incluso, Margarita habló sobre la posición de Trump y los republicanos de oponerse al aborto al recordar que ella tuvo que someterse a uno porque su feto de cinco meses había muerto. “Tuve acceso a servicios de salud”, lo que no tienen muchas mujeres en estados donde han aprobado leyes antiaborto muy restrictivas que ha costado ya la vida de algunas féminas, asegura.
Mientras que en Midtown, el encargado de un centro de votación, Michael Bushman, explicó que a diferencia de otros años, hoy se han visto menos colas, ya que en los nueve días de votación anticipada “mucha gente vino”. Nueva York comenzó a permitir la votación anticipada en 2019.
“Antes de que existiera la votación anticipada, se formaban colas que daban la vuelta a la manzana, pero como la gente tiene nueve días para votar por adelantado, no hay colas. Hoy, hay un movimiento constante, pero fluido. Los votantes no tienen que esperar una o dos horas”, dice Bushman.
En total, 1.089.328 residentes de la ciudad votaron de manara anticipada, un número ligeramente inferior al de las elecciones presidenciales de 2020, cuando más de 1,1 millones de personas votaron antes del día de las elecciones.
Ruth E. Hernández Beltrán