El presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha corregido este martes en Ceuta a su 'número 3', el andaluz Elías Bendodo. Lo ha hecho con contundencia: “Es evidente que España no es un Estado plurinacional. Es una obviedad y por tanto el debate no existe. Ni es ni será un Estado plurinacional”, ha reiterado el político gallego, que ha atribuido la frase del coordinador general de su partido a “un error rectificado al poco tiempo”.
“Lo que es España viene definido por nuestra historia desde hace 500 años. España está muy catalogada, identificada y descrita en el artículo 2 de la Constitución, que garantiza la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones”, ha reproducido casi literalmente la Carta Magna.
A juicio del político gallego, “el PP ha nacido para redactar, cumplir y defender la Constitución, que dice que España es una nación que garantiza la autonomía de nacionalidades y regiones y busca la solidaridad entre todas ellas”. “Ese ha sido, es y será el ideario de nuestro partido durante todo el tiempo que exista”, ha apostillado Feijóo, que hace diez días, en el Cercle d'Economía dijo que “para una nacionalidad como la catalana, la opción más acorde con la preservación de la estabilidad y de su identidad es la recuperación de su liderazgo en España y la contribución a un Estado y una Unión Europea vigorosos”.
El líder del PP ha querido deshacer el entuerto que usa la ultraderecha para fustigarlo desde Ceuta, ciudad que había visitado en noviembre del año pasado como presidente de la Xunta y a la que ha vuelto por primera vez como líder de la oposición a Pedro Sánchez para fustigar al “inquilino” de La Moncloa por cómo se han reabierto, esta madrugada, las fronteras terrestres de España con Marruecos coincidiendo con el primer aniversario de la crisis migratoria de 2021.
Feijóo se ha “alegrado” por el paso dado hacia la “normalidad” en Ceuta y Melilla con el restablecimiento del tránsito con el país vecino, pero de forma crítica tras reunirse con la patronal local y antes de hacerlo con representantes de las Fuerzas de Seguridad. “No es una celebración completa porque habría que exigir visados o documentos similares a todos los marroquíes que quieran entrar y contratos a los trabajadores transfronterizos”, ha protestado antes de reprochar “falta de previsión” a Interior por reabrir el paso del Tarajal “sin garantías jurídicas ni seguridad plena, así como sin aduanas comerciales ni los medios humanos y materiales que necesitan la Policía Nacional y la Guardia Civil”.
Por elevación, ha cargado contra Sánchez por “romper el consenso que sobre política exterior con Marruecos, Argelia, el Sáhara y Naciones Unidas habíamos mantenido durante décadas”. “El PP es un partido responsable y leal con el Estado, pero hay que decirle al Gobierno, que es un inquilino temporal, que no puede negociar lo que es de todos, romper consenso básicos o dar bandazos diplomáticos a espaldas de las Cortes, porque eso nos debilita”, ha añadido.
“No sé las razones por las que lo ha hecho, por qué mandó esa carta unilateral que ocultó a las Cortes y de la que nos enteramos por Marruecos, ni nada sobre el contenido de la audiencia mantenida con Mohamed VI: es histórico que el Parlamento lo haya reprobado, que el Gobierno se haya dividido y que el presidente fuese a Rabat sin respaldo de la soberanía nacional”, ha censurado.
Aborto, rey emérito y Aguirre
A preguntas de los periodistas, Núñez Feijóo, ha defendido su rechazo a que la ley del aborto cuyo anteproyecto ha aprobado este martes el Consejo de Ministros recupere el derecho a las mujeres de 16 y 17 años a interrumpir su embarazo de forma voluntaria sin el permiso expreso de sus padres. “Si la legislación prohíbe consumir alcohol a una menor de 18 años, parece razonable que esa legislación solicite el permiso de los padres para la interrupción voluntaria del embarazo”, ha dicho.
Feijóo también ha acusado al Gobierno de desplegar una cortina de humo con la reforma del aborto, una iniciativa que está contemplada en el acuerdo firmado entre el PSOE y Unidas Podemos. “Cuando en España tenemos problemas, el objetivo es distraer”, ha señalado, para reiterar: “Nosotros pensamos que las menores deben contar con el consentimiento de sus padres”. A renglón seguido, ha cargado la responsabilidad sobre las mujeres: “Las menores que ni siquiera sus padres conozcan esa decisión, se produce ruptura de afectividad con los padres en un momento muy difícil de la menor que es tomar una decisión de esa categoría”.
Preguntado por el posible regreso de Juan Carlos I se ha confesado “absolutamente partidario de que vuelva a su país si lo considera oportuno porque tiene derecho a hacerlo”. “Que yo sepa no tiene ninguna causa pendiente en nuestro país, es ciudadano español, mantiene su pasaporte y me parece que volver a erosionar la Jefatura del Estado, aunque sea a través del rey emérito, es algo que no merecemos, mucho menos que se incentive desde el Gobierno”, ha rechazado.
Interpelado por las conversaciones de Esperanza Aguirre y María Dolores de Cospedal con el comisario Villarejo para pedirle ayuda con distintos procedimientos y sobre si ha adoptado alguna medida para que ese tipo de prácticas no se repitan a su alrededor, Feijóo ha remarcado que su partido “es absolutamente respetuoso con el Estado de Derecho, las investigaciones judiciales y sus decisiones”. “Si se quieren traer a colación grabaciones de hace una década, cada uno está en su derecho”, ha desdeñado, “pero nuestra posición es conocida: respeto a las investigaciones y decisiones que afecten a nuestra formación o a otras”.