Las opiniones de la cúpula del PP sobre las posibilidades de Juanma Moreno en las elecciones andaluzas del 24 de marzo oscilan entre el “está preparado” y “le falta rodaje”. El candidato a la Junta de Andalucía ha sido confirmado oficialmente por el comité electoral del PP antes de que Mariano Rajoy viajase este sábado a Torremolinos para lanzar oficialmente su campaña. El resto de aspirantes tendrá que esperar porque la inminencia de las elecciones andaluzas ha obligado a Génova a rehacer la agenda para anteponer el nombramiento de Moreno. El jefe del Ejecutivo volverá el próximo fin de semana para respaldar a Moreno en otro mitin.
“Para nada, estamos perfectamente preparados” era la respuesta de María Dolores de Cospedal hace ya unos meses, cuando el PP temía que Susana Díaz adelantara las elecciones en Andalucía. La secretaria general aseguraba que, aunque joven, tenía “muchas ganas” y “estaba listo”. Pero en la cúpula de Génova otro dirigente admitía que las prisas de Díaz obligaban al candidato del PP a correr para darse a conocer entre los andaluces, ya que sigue estando “un poco verde”.
“La marca Juanma” se convertirá, según insisten algunos en el PP contra todo pronóstico, “en el próximo presidente de la Junta”. Contra las acusaciones de “casta” y la etiqueta de “señoritos” que persigue a los conservadores andaluces, el partido contrapone que es “nieto de jornaleros” y que nació en Barcelona, donde sus padres habían emigrado en los 60.
Carlos Floriano aseguraba el lunes que en Andalucía no volverá a haber “un pacto de perdedores”, que es como califica el acuerdo entre Díaz e IU con el escozor de que fuera inútil la victoria de Javier Arenas en las anteriores elecciones. En esta ocasión, defiende que el PP podría gobernar en minoría.
El candidato desconocido
El escaso índice de conocimiento de Moreno entre los andaluces es su principal obstáculo, aunque el PP defiende que sus sondeos indican que ha crecido en valoración en los últimos meses y que cada vez le ponen cara más ciudadanos aunque solo era el 59% el porcentaje de índice de conocimiento. El problema fue puesto de manifiesto por El Intermedio, que hace dos semanas hizo pasar a otra persona por Moreno sin que los cordobeses encuestados se dieran cuenta.
Para impulsarlo públicamente, el propio Rajoy lo presentó en un desayuno informativo en Madrid y prometió que “si Juanma sale elegido no será para irse a los tres meses a otro sitio”. El presidente atacaba así directamente a la presidenta andaluza por sus aspiraciones en la política nacional. Junto a Rajoy, acudieron a arropar al candidato cuatro ministros. También Cospedal, quien no apostaba por él hace ahora un año.
Con Cospedal en contra
Moreno no contaba con el apoyo de Cospedal ante el accidentado congreso regional donde no hubo más candidatura que la suya, pero no se supo hasta el último momento. La secretaria general prefería a José Luis Sanz, como parte de la dirección regional. Javier Arenas, a Moreno, al que también avalaba la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. Como es habitual en el PP, a última hora decidió Rajoy. La decisión desautorizó a Cospedal como máxima responsable del partido.