La oferta de Pedro Sánchez para un Gobierno de coalición sin Pablo Iglesias se mantiene. Los socialistas abren la puerta a cualquier dirigente de Unidas Podemos previo paso por un acuerdo programático y que los nombres sean consensuados con el presidente. A tres días de que comience el debate de la investidura, el Ejecutivo sostiene que está dispuesto a plantearse la incorporación de miembros “representantivos” de Unidas Podemos.
“Asume la responsabilidad y dice esto es lo que necesita España: voy a ir a una investidura en la que acepto, ofrezco un gobierno de coalición, pero no veo a Pablo Iglesias dentro –ha expresado Isabel Celaá parafraseando a Sánchez–. No ha dicho más de nadie. Por tanto, en fin, todo lo demás es un escenario abierto”.
El Gobierno habla ya abiertamente de un Gobierno de coalición del que solo excluyen a Iglesias por causas “políticas y funcionales”. “No es lo mismo que en el interior de un Gobierno se produzca una discrepancia legítima con miembros de otra fuerza política representativa que con el líder de esa fuerza”, ha expresado la portavoz tras la reunión del Consejo de Ministros.
Sánchez reclamó a Iglesias un paso atrás que en Moncloa confían acabe dando antes de la semana que viene. “Es una pretensión inasumible el sacrificar el interés general al interés de una persona. No creo que Pablo Iglesias, él mismo, pase por ahí, no creo que quiera que por mor de una persona vayamos a sacrificar el interés general la semana que viene”, ha señalado Celaá.
Los socialistas han rebajado el nivel de exigencia con respecto a la semana pasada, cuando se abrieron a la incorporación de miembros de Unidas Podemos con un perfil técnico y no tanto político. “Se ofrece una entrada a personas representativas con conocimientos técnicos. Es impensable que alguien que tiene que liderar un ministerio no tenga esos conocimientos técnicos. Para nosotros eso no es admisible y por supuesto un ministro siempre es político para que puedan llevar a cabo la encomienda de gestión que eventualmente tengan”. Celaá ha reiterado que esa propuesta es “razonable”.
“El presidente se ha movido. Una vez más ha hecho una oferta a Unidas Podemos para un Gobierno de coalición. Pedían un Gobierno de coalición y tienen una oferta de un Gobierno de coalición”, ha expresado Celaá. “No vamos a entrar en ningún nombre. El presidente, con toda honestidad y con toda claridad, identificó exactamente cómo estaban las cosas afirmando que no había condiciones para la entrada de Pablo Iglesias en el gabinete. Punto. Las razones ustedes las conocen”, ha señalado Celaá.
La posición es calcada a la de la dirección del PSOE, que se ha abierto desde la entrevista de Sánchez en Al Rojo Vivo este jueves a la incorporación de miembros de la cúpula de Unidas Podemos al gabinete. “El principal escollo es Iglesias. Hablemos de la participación de otros miembros de Unidas Podemos reconocidos”, ha dicho esta mañana en RNE la número dos del partido, Adriana Lastra.
En Moncloa creen que hay una esperanza en que Unidas Podemos cambie de posición e Iglesias termine por apartarse para que haya Ejecutivo. Los socialistas creen que es una oferta intermedia entre las pretensiones de Iglesias y las suyas, que inicialmente era un Gobierno monocolor. No obstante, los portavoces de Unidas Podemos han rechazo de plano esa propuesta, que emplazan a Sánchez a comunicársela personalmente al secretario general de Podemos.