El juez Pablo Ruz se ha vuelto incómodo para el PP tras los avances que ha hecho en el último año en la instrucción de las dos macrocausas que afectan al partido de Mariano Rajoy: el caso Gürtel y la investigación de la financiación ilegal a partir de los 'papeles de Bárcenas'.
Ante la posibilidad de que el mandato de Ruz no sea prorrogado por un Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) controlado por los conservadores, el Gobierno resta importancia a la posibilidad de que el magistrado salga del Juzgado número 5 de la Audiencia Nacional en las próximas fechas gracias a la convocatoria de plazas, entre la que se encuentra este juzgado en el que trabaja como sustituto desde hace años.
“No entiendo por qué tendría que criticarse que el juez Ruz no continuara al frente del caso Gürtel”, ha dicho el ministro de Justicia, Rafael Catalá, en un desayuno organizado por Europa Press.
El CGPJ podría convocar plazas para cubrir más de 300 puestos vacantes. Entre esas convocatorias, el Poder Judicial podría incluir el Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, en el que Ruz sustituye al juez titular, Miguel Carmona, a quien el Gobierno envió a Reino Unido como juez de enlace tras haber ocupado un puesto como vocal en el organismo de gobierno de los jueces. El CGPJ ha prorrogado durante todo ese tiempo la comisión de servicios por la que Ruz tiene un puesto en la Audiencia.
La salida de Ruz dilataría aún más en el tiempo las investigaciones que afectan al PP y que el magistrado ha acelerado recientemente. El último movimiento, el cierre de la instrucción de una pieza del caso Gürtel, provocó la dimisión de Ana Mato por haber sido beneficiaria “a título lucrativo” de la trama corrupta que lideraba Francisco Correa. Ese mismo auto apunta a que el PP se benefició de más de 300.000 euros por las actuaciones de la trama.
“Está cogido por los pelos”
En el PP han surgido ya críticas directas a la actuación del magistrado. María Dolores de Cospedal ha negado durante una entrevista en Telecinco la existencia de los indicios en los que Ruz se sustenta para concluir que el PP se enriqueció gracias a la trama y se financió ilegalmente, y ha cuestionado que la investigación tenga una base sólida.
“Está tan cogido por los pelos que no es de recibo. Ruz dice que eso sería así si creemos lo que dice Bárcenas, y yo no lo creo. Primero hay que creer a un mentiroso compulsivo y corrupto”, ha expresado la secretaria general del PP.
La número dos de la organización no ha querido opinar sobre si el CGPJ debe relevar al juez o mantenerlo al frente del caso porque, asegura, cree en la independencia del poder judicial. Pero sí ha señalado que la investigación “está prácticamente terminada” y que el juez debe ser “el que corresponda legalmente”.
Rajoy también tuvo que responder el lunes sobre este asunto y se amparó en la independencia judicial. “No corresponde al Gobierno, sino al órgano de gobierno de los jueces, tomar decisiones sobre ese asunto y, por tanto, yo no tengo nada que decir, sea cual sea la decisión que se tome, precisamente por respeto a la independencia de ese órgano de gobierno de los jueces”, afirmó.
Esta postura del presidente del Gobierno contrasta con la actitud que mantuvo ante el reparto de la instrucción de los 'papeles de Bárcenas', que inicialmente iba a recaer sobre el juez Javier Gómez Bermúdez, incómodo para los intereses del PP. Rajoy llamó personalmente al CGPJ para interesarse por este asunto.