El Consejo de Ministros ha aprobado destinar una partida de 29,7 millones de euros para los servicios de mantenimiento de los despliegues fijos y unidades móviles para el control de fronteras marítimas del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) de la Guardia Civil.
El Sistema Integrado de Vigilancia Exterior, puesto en marcha en el año 2000, tiene por finalidad controlar la frontera sur de la Unión Europea, incluidas las Islas Canarias, para controlar la inmigración ilegal, las redes mafiosas y el narcotráfico.
Las mejoras, según informa el Gobierno, se prestarán en trece despliegues fijos de SIVE, excepto Huelva, Almería y Gran Canaria, que seguirán disponiendo de un servicio de mantenimiento ya que, apunta el Ejecutivo, han sido recientemente modernizados, así como en seis de sus trece unidades móviles.
El objetivo es ampliar la capacidad de vigilancia en zonas donde no exista cobertura de los despliegues fijos, al tiempo que otras siete unidades móviles, con más de trece años y un material técnico muy antiguo dejarán de estar en servicio.
El sistema de mantenimiento que se contratará incluirá desde servicios básicos ante averías de cualquier índole hasta las producidas pro desastres naturales o sabotajes, además de que el contrato incorporará la dotación de recursos personales y materiales para garantizar una correcta gestión mediante inventarios o auditorías.
A este acuerdo del Consejo de Ministros se suma la autorización a la Dirección General de la Guardia Civil de contratar el suministro de prendas de uniformidad reglamentarias con destino al personal de distintas unidades de la Guardia Civil, para los años 2018, 2019, 2020 y 2021, por un valor estimado de 21.297.500 euros.