El Gobierno rectifica para salvar la prórroga y pacta con Ciudadanos que el estado de alarma se extienda 15 días y no un mes

El Gobierno ha dado marcha atrás en su intención de solicitar una última prórroga del estado de alarma al Congreso de los Diputados que se extendiera hasta el final del proceso de desescalada -el 27 de junio- al llegar a un acuerdo con Ciudadanos para que se extienda solamente por un periodo de quince días. El Ejecutivo rectifica así su plan inicial de extender el estado de alarma por un periodo de aproximadamente un mes, una estrategia adoptada tras las dificultades para sacar adelante la cuarta prórroga. No obstante, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Salvador Illa ha defendido que es “imprescindible” mantener el estado de alarma hasta el “final del proceso de desescalada”.

A pesar de que el Gobierno comenzó la negociación con los grupos con mayor antelación que en ocasiones anteriores, ha mantenido las conversaciones hasta prácticamente el último momento. La confirmación del acuerdo con Ciudadanos se ha producido una vez que el Consejo de Ministros había concluido su reunión. “Era la que más se acomodaba a los requisitos de las fuerzas políticas”, ha expresado la portavoz del Gobierno.

Uno de los compromisos del Gobierno es impulsar las “reformas legislativas necesarias que permitan una salida ordenada del estado de alarma y la gestión de la pandemia en ese momento, ya sin la utilización de la herramienta constitucional de la declaración de alarma”, según figura en el comunicado enviado por Moncloa. “En esos mismos 15 días, el Gobierno comunicará a Ciudadanos las primeras conclusiones de su análisis con el objetivo de dialogar y, si es posible, consensuar las medidas y reformas legislativas necesarias”, apostilla. Esa es la reclamación que le hace el PP desde hace un mes, pero que también le reclamaron los aliados parlamentarios como ERC y PNV, al igual que Ciudadanos.

Además, Inés Arrimadas ha arrancado al Gobierno una serie de compromisos en materia económica y social como el aumento a cuatro meses de la moratoria del pago de impuestos y la agilización en el pago de los ERTE -con que se recibirán en el mes de junio “como muy tarde”-. El Gobierno estudiará la “posibilidad de ampliar más allá de la vigencia del estado de alarma la prestación extraordinaria por cese de actividad de los trabajadores autónomos y la consecuente exención de sus cuotas de Seguridad Social durante la percepción de dicha prestación” así como el impulso del mes de julio como periodo hábil en el Congreso para recuperar el trabajo perdido durante la suspensión parlamentaria con motivo de la COVID-19.

Según el comunicado enviado por Ciudadanos, “no se va a producir ninguna mesa de negociación con ERC ni los separatistas para dinamitar la igualdad entre españoles”. “Por eso nos mostramos satisfechos de haber logrado aislar las demandas de los nacionalistas para poner a los españoles en el centro y haber conseguido mejoras para todos ellos”, expresa el partido de Inés Arrimadas.

El portavoz adjunto de Ciudadanos, Edmundo Bal, ha advertido esta tarde al presidente del Gobierno de que “cualquier concesión que haga a los nacionalista sería incompatible con este acuerdo: es una vía o la otra”. Aunque Bal ha señalado que es “un gran acuerdo”, ha insistido en que “esa mesa de la vergüenza” con los independentistas no debe impulsarse porque si es así su partido entonces rectificará su postura: “Nosotros dejamos muy claro cuál era nuestro mensaje, una vía [la de Ciudadanos] o la otra”.

“El acuerdo que hemos cerrado no es un cheque en blanco al Gobierno. Estaremos vigilantes para que se cumpla todas las condiciones que hemos pactado”, ha expresado en una rueda de prensa telemática. “Es un acuerdo para poner coto al estado de alarma, para no se abuse de esta figura, y que busca salvar empleo y vidas”, ha añadido el portavoz de Ciudadanos, que no ha podido garantizar que en la votación de este miércoles haya algunos diputados en el Congreso, como el empresario Marcos de Quinto -muy crítico con el Gobierno-, que vayan a romper la disciplina de voto.

ERC sigue negociando

No obstante, en el PSOE sostienen que mantiene la comunicación con ERC para la quinta prórroga del estado de alarma. Por ahora el grupo que dirige Gabriel Rufián, permanece en el 'no', pero con los canales de comunicación abiertos para una posible abstención. De hecho, la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha asegurado que no le consta que Arrimadas haya exigido que cese el diálogo con las fuerzas independentistas sino que sus reclamaciones han sido de carácter económico.

Retomar la mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat era una de las exigencias de ERC en la negociación que también había comenzado con Moncloa para la quinta prórroga del estado de alarma. Sánchez aseguró este sábado en una rueda de prensa que la resolución del conflicto político seguía siendo uno de los objetivos del Ejecutivo, aunque pidió desvincular el diálogo de la negociación del estado de alarma: “El Gobierno de España quiere abordar todas las crisis que hemos heredado de anteriores épocas y una de ellas es una crisis política que se vive en Cataluña y que, lógicamente, queremos abordar”. En el comunicado difundido por Moncloa sobre el acuerdo con Ciudadanos no se hace ninguna referencia al diálogo con Catalunya.

Las exigencias de los republicanos catalanes pasan también por la “codecisión” con las comunidades autónomas en la desescalada. El Ejecutivo ha lanzado guiños a las autonomías para ampliar la cogobernanza, aunque el PSOE rechaza que sean las comunidades las que tomen las decisiones en exclusiva. El borrador del decreto de prórroga publicado por la Cadena SER recoge la toma de decisiones conjuntamente, la aplicación por parte de las presidencias regionales, así como el levantamiento de la alarma de forma asimétrica en función de la evolución en el proceso de desescalada.

“El Gobierno considera que cuenta con los apoyos”

Como ya anunció Sánchez, el nuevo decreto presenta algunas novedades. Para empezar, solo se mantiene como autoridad delegada el ministro de Sanidad -y pierden sus competencias extraordinarias José Luis Ábalos, Margarita Robles y Fernando Grande-Marlaska-. Además, se levantan algunas restricciones; por ejemplo, a partir del 4 de junio vuelven a contar los plazos procesales y también los plazos de prescripción y caducidad de derechos.

Preguntada por si Sánchez tiene los apoyos para sacar adelante la quinta prórroga del estado de alarma, Montero se ha mostrado “extraordinariamente prudente” sobre los apoyos, pero ha asegurado que “el Gobierno considera con los apoyos necesarios” para que salga adelante, aunque haya que esperar a que los diputados pulsen definitivamente los botones del sí, el no o la abstención. Montero ha advertido de que si decae el estado de alarma se pondría en “riesgo” el trabajo realizado hasta ahora con el confinamiento.

Gobierno y PSOE han negociado con todas las formaciones del Congreso, a excepción de PP y Vox que, según ha recordado Montero, se han “autoexcluido” al anunciar su voto en contra. En la sesión de control en el Senado, la portavoz ha pedido a los conservadores que “vuelvan a la cordura, a la vocación de ser un partido de Gobierno”. A juicio de la titular de Hacienda el PP ejerce una “hipocresía política” que le lleva a criticar cada una de las decisiones del Ejecutivo. Por eso, le ha lanzado una oferta de mano abierta: “Aquí seguiremos esperando. Cuando ustedes tengan a bien volver a ese sentido común aquí estará el PSOE para establecer alianzas con ustedes”, informa Iñigo Aduriz

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