Ceuta, 20 may (EFE).- En primer plano una voluntaria de la Cruz Roja abrazando a un inmigrante subsahariano sentado sobre una roca y detrás de ella otros compañeros que, junto con un militar, atienden a otro inmigrante que acababa de llegar exhausto a la orilla. Es una de las imágenes que ha dado la vuelta al mundo.
La protagonista de esta historia es una joven llamada Luna, de tan solo 20 años, que lleva unos meses en Ceuta, donde llegó para hacer las prácticas al ser estudiante de Enfermería y encontrarse su madre en la ciudad ceutí.
La joven, natural de Móstoles (Madrid), optó por ingresar como voluntaria en la Cruz Roja Española en Ceuta y hoy su imagen dando un emotivo abrazo a un inmigrante se ha convertido en todo un símbolo.
“(#GraciasLuna). Somos una organización en la que hay muchas Lunas, que ayudan a diario a personas como las que llegan a Ceuta.O a Arguineguín.O a Canarias.O que están en tu barrio En todo el mundo,#EnTodasPartes#Humanidad #Voluntariado #Independencia #Neutralidad”.
Este es el tuit oficial de la Cruz Roja Española para agradecer el gesto de esta voluntaria y, de paso, apoyarla en estos momentos en los que, junto a infinidad de mensajes de apoyo, también ha recibido insultos en las redes sociales, lo que le ha llevado a abandonarlas.
“Es triste que esté pasando eso porque muchos han perdido el respeto. La opinión es libre pero otra cosa son los ataques personales que se están produciendo en las últimas horas, eso no es normal”, se ha lamentado ante Efe la responsable de Comunicación de la Cruz Roja en Ceuta, Isabel Brasero.
De hecho, Brasero es quien responde a Efe porque la protagonista de la historia ha decidido “aislarse de todo” e incluso se le ha ofrecido apoyo de los psicólogos de la institución para poder superar estos momentos.
“A pesar de su gesto cariñoso hay personas que no lo han entendido y la han criticado”, ha comentado.
De hecho, Luna ha optado por no hacer ningún tipo de declaraciones e incluso ha tomado la determinación de cerrar temporalmente sus redes sociales, principalmente Twitter, “donde ha recibido muchas felicitaciones pero también muchas críticas injustas”.
La joven se ha visto en una situación “desagradable a pesar de trabajar con el signo de la humanidad, por lo que ella está ahora mismo un poco bloqueada ya que no entiende lo que está pasando por algo que ha visto totalmente natural”.
Por Rafael Peña