Con este objetivo, la federación de izquierdas ha registrado una proposición no de ley para su debate en el Pleno del Congreso a la que ha tenido acceso Europa Press.
Según denuncia en la exposición de motivos, las personas que están buscando a bien a sus descendientes o a sus padres suelen chocar siempre contra el mismo “muro”: “la opacidad de las instituciones religiosas” que gestionaban los orfanatos, también llamados casas de cuna o de expósitos, que monopolizaban el sistema de adopciones en el franquismo.
A estas instituciones llegaban en aquellos años los hijos de mujeres sin medios que eran entregados en adopción diera o no permiso la progenitora. También se daban casos, apuntan desde IU, en los que los niños se dejaban durante un tiempo determinado, pero cuando sus madres iban a recogerlos les decían que habían muerto y en realidad habían sido cedidos a otras familias.
SON FICHEROS PRIVADOS
En los registros de estos orfanatos figuran los nombres de todas las madres biológicas y de los padres adoptivos, pero se trata de ficheros privados a los que las entidades religiosas no permiten el acceso.
Izquierda Unida pide “poner freno a esta situación” y para ello intentará que el Congreso inste al Gobierno a obligar por ley a que los afectados por adopciones ilegales puedan consultar esos registros.
Además, señalan que del conocimiento de esa información se pueden derivan implicaciones económicas, como el derecho a herencias, o para la salud de los menores que fueron dados en adopción sin autorización de sus madres.