El voto por sectores de edad preocupa siempre mucho a los partidos políticos, y es un claro indicativo de sus debilidades y fortalezas pero, sobre todo, de su posición en la sociedad.
La encuesta realizada por CELESTE-TEL para eldiario.es es muy significativa en este aspecto, porque dibuja el presente y el futuro de cada partido y subraya la desafección política que se está imponiendo entre los electores.
Así, en cuanto a intención de voto por tramos de edad, sorprende un dato especialmente. El 51,6% del llamado voto joven, de 18 a 30 años, optará por la abstención. Es decir, que más de la mitad de este cuerpo del electorado tiene decidido no acudir a las urnas en las próximas elecciones generales, según el sondeo. La cifra es muy similar al porcentaje de población joven (entre 16 y 24 años) que se encuentra en situación de desempleo: el paro afecta al 54,4% de los jóvenes en España, según los datos trimestrales de la Encuesta de Población Activa.
El PSOE es todavía el partido más votado en este segmento de edad, con un 13%, a más de cuatro puntos de distancia del PP, pero muy lejos de cuando José Luis Rodríguez Zapatero presumía antes de las elecciones del 2004, que entre los menores de 30 años, superaban al partido de Mariano Rajoy en más de veinte puntos. Lo que era verdad y, en gran parte, le llevó a ganar las elecciones.
En esta franja de edad, Izquierda Unida es la segunda fuerza con mayor porcentaje (un 9,4%), por encima de los “populares” y doblando casi a UPyD.
El PSOE también es la fuerza política más votada entre los ciudadanos entre 31 y 44 años edad. Supera en dos puntos al PP y en más de seis a Izquierda Unida. En este segmento, la abstención decáe a porcentajes algo por encima del 40%.
El derrumbe de los socialistas y de Izquierda Unida está en la franja de edad de 45 a 64 años, y especialmente, entre los jubilados que, hasta ahora, eran los mayores de 65 años.
En ambos sectores, el PP se convierte en el partido más votado, hay menor abstención que en los otros segmentos de edad, y las diferencias con sus adversarios son muy significativas. Baste decir que, entre los ciudadanos de mayor edad, el PP aventaja al PSOE en más de diez puntos. Y, actualmente, constituyen la población mayoritaria en nuestro país con derecho a voto contando por estos grupos de edades.
Por ello, la encuesta refleja nítidamente que el granero de votos del PP está en las personas mayores. Que ni el PSOE ni IU se consolidan entre la juventud de forma tan abrumadora como en otros tiempos, aunque tengan mayoría. Y que el fragmento intermedio de edad está más dividido y no resulta determinante.
Con toda seguridad, las estrategias políticas de estos partidos irán dirigidas a mantener sus caladeros pero, sobre todo, a intentar pesar en los ajenos. Pero como están posicionados los ciudadanos, les quedará mucho trabajo por hacer.