La consejera de Educación, Mar Moreno, ha avanzado hoy que la Junta de Andalucía trabajará en un “plan B alternativo a la reforma educativa” del Gobierno para “minimizar los efectos negativos” de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce).
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Moreno ha indicado que Andalucía “no va a quedarse de brazos cruzados a esperar que se apruebe la ley” tras haberle dado el visto bueno el Consejo de Ministros el viernes pasado.
Ha alegado que “tras haberse desoído todas las alternativas que proponía Andalucía” a la reforma educativa del Partido Popular, la Junta considera que ha llegado el momento de poner en marcha el plan B y para ello quiere contar con más de 500 expertos de la comunidad educativa con los que empezará a trabajar en junio, pero sobre todo en otoño, ya que la puesta en marcha de la LOMCE llevará tiempo.
En concreto, la consejera ha explicado que se analizarán los márgenes legales que tiene Andalucía para adoptar decisiones que competen a las comunidades autónomas relativas a contenidos curriculares, asignaturas, horarios y autonomía de los centros.
También analizarán las “posibles causas de inconstitucionalidad” de la Lomce, así como la postura de la administración andaluza en los futuros desarrollos reglamentarios de la ley orgánica.
Asimismo, ha expresado su rechazo a la Lomce porque supone una “agresión a la igualdad de oportunidades”, avanza en la privatización de la enseñanza y supone una “regresión ideológica que nos llevan treinta años atrás”.