La Junta de Castilla y León se niega a aclarar por qué ocultó una sede comercial en Panamá

La Junta de Castilla y León persiste en la falta de transparencia sobre las sedes comerciales que abrió en el extranjero entre los años 2004 y 2012. Tras desvelar eldiario.es la existencia de una oficina comercial en Panamá de la que nunca se informó oficialmente, el Gobierno regional optó por el silencio, mientras el PSOE y Podemos exigían explicaciones. Pero la portavoz de la Junta, Milagros Marcos, no pudo librarse de la cuestión en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno de cada jueves.

A la pregunta directa de este medio sobre las razones de ocultar sobre una oficina en Panamá, y otra en Miami, Marcos respondió que “son mecanismos de negocio para trabajar en el exterior” y que “el sistema” es diferente en cada país, por lo que hay “un convenio con una empresa tractora”, obviando que, hasta el año 2011, Panamá figuraba en la lista negra de paraísos fiscales de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

La portavoz insistió en que se había informado correctamente por parte del que fue consejero de Economía, Tomás Villanueva, en una respuesta a la Mesa de las Cortes planteada por el Grupo Parlamentario Socialista. Lo cierto es que Villanueva nunca informó ni sobre Panamá ni sobre Miami.

“De lo que se trata es de buscar la mejor alternativa en cada uno de los países, la que mejor se ajuste a las características de ese país”, insistió Marcos en referencia a Panamá, un país que destaca precisamente por la cantidad de sociedades off shore y cuentas ocultas. “Lo que hay que poner en valor es que las exportaciones a Miami y a Panamá se han multiplicado por cinco y esto es fruto del trabajo que ha hecho Excal (la oficina de internacionalización de la Junta) como ente que trabajaba para garantizar a las empresas que podían implantarse en esos países”. Para justificar ese “trabajo” de Excal, la portavoz dijo que en Estados Unidos (no aportó cifras de Miami) el volumen de las exportaciones han pasado “de 80 millones en 2007 a 386,4 ahora” (Excal cerró sus oficinas en Miami, San Francisco y Los Ángeles entre los años 2011 y 2012 y tan sólo mantiene una en Nueva York, de manera que los datos actuales no serían achacables al trabajo de la Junta).

En el mismo sentido se pronunció sobre Panamá, con un volumen de 4 millones en 2007 (en plena crisis económica) y 21 en la actualidad (La oficina cerró en 2011). “Es un crecimiento que justifica de sobra que haya personas que estén apoyando la exportación en estos países”, afirmó antes de señalar que el modelo es el que se considera más oportuno –una subvención a la Cámara de Comercio para que contratase por 150.000 euros a un amigo de José María Aznar, José Luis Esteve, en el caso de Miami, y un convenio de cuantía desconocida con una constructora burgalesa, ciudad de origen del presidente Herrera y adjudicataria de multitud de obras de la Administración–.

¿Por qué la Junta negó por escrito que existiese una oficina en Panama? “Porque las preguntas tienen que estar bien hechas, siempre se responde a lo que se pregunta”, dijo Marcos. Lo cierto es que el director de la Agencia de Desarrollo Económico contestó el año pasado al portavoz del Partido Castellano textualmente que “la Junta nunca ha tenido oficina comercial en la República de Panamá”, dato que como demostró eldiario.es era falso.

Brecha en la Junta

La gestión de las sedes comerciales en el exterior han abierto una brecha en la Junta, que incluso, según fuentes cercanas al caso, rastrea a los trabajadores y funcionarios de las empresas públicas en busca de un presunto filtrador. Este diario publicó el pasado mes de marzo que llegó a pagar hasta el cuádruple por los alquileres de las oficinas en un periodo de cinco años. Los datos facilitados en 2012 por la Consejería de Economía y Empleo revelan un gasto que se multiplicaba en algunas de ellas de año en año.

A ello se une el hecho de haberse sabido ahora que la oficina de Bruselas se alquiló a una sociedad belga que en realidad estaba en manos de los dueños de la constructora del edificio de Economía conocido como 'Perla Negra' e investigado por sobrecostes de varias decenas de millones de euros. El Grupo Parlamentario Socialista ha solicitado a la Junta el resto de los contratos de las 17 sedes (las conocidas hasta ahora) sin éxito. La respuesta de Economía es que sólo tuvo una oficina en Bruselas, a pesar de la contradicción de que el anterior consejero informase de la existencia de 15 (omitiendo Panamá y Miami). Por ello, los procuradores José Francisco Martín y Javier Izquierdo registraron en la Consejería toda una batería de preguntas y petición e información que se ha negado de manera reiterada. Izquierdo comentó que había “evidencias de una trama corruptelas” que deberían llegar a manos del juez que investiga el caso Perla Negra, que ha incluido el caso de la oficina de Bruselas.

El procurador recordó que otra de las oficinas que “huele mal”, porque se invirtieron en ella 1,2 millones de euros del total de 3,5 millones que la Junta notificó que costaban las 15 oficinas en el exterior es la de Varsovia. Izquierdo subrayó que Varsovia es el país donde vive actualmente el principal beneficiario de la trama eólica, Alberto Esgueva. Además, el edificio de Varsovia supuestamente alquilado por la Junta era propiedad de Hynes, una inmobiliaria con la que Esgueva hizo posteriormente importantes negocios. Por último, los socialistas pidieron información sobre las sedes de Miami y Panamá, sacadas a la luz por eldiario.es y de las que la Junta “no había notificado” su existencia.