La Audiencia Nacional ha negado el derecho al olvido de Diego Yllanes, el asesino de la joven Nagore Laffage en los Sanfermines de 2008. Los jueces han rechazado el recurso del asesino, en el que solicitaba que Google retirara varias noticias relacionadas con el crimen que perpetró hace ahora más de 15 años, acabando con la vida de la joven de una brutal paliza después de que ella se negara a mantener relaciones sexuales con él. El asesino, que puso en marcha esta reclamación después de cumplir su condena de 12 años de prisión, se quejaba de que era presentado como un delincuente sexual a pesar de no haber sido condenado por ese delito sino por homicidio.
José Diego Yllanes Vizcay tenía 27 años cuando, en julio de 2008, coincidió con Nagore Laffage, que tenía 20 años en ese momento, en los Sanfermines de Pamplona. Según declaró probado la Justicia en firme, la víctima interpretó “erróneamente” el contacto físico “apasionado” del agresor y le amenazó con “destruir su carrera y denunciarle”, a lo que el homicida contestó acabando con su vida de una paliza.
El tratamiento judicial de estos hechos fue objeto de denuncia tanto en vía judicial como por parte de la familia de la víctima. Las acusaciones, encabezadas por la madre de la joven, siempre solicitaron que su condena fuera mayor y por un delito de asesinato, no de homicidio. También denunciaron que nunca se trató como un caso de violencia sexual aunque la reacción violenta de Yllanes tuvo como origen la negativa de la joven a mantener relaciones sexuales con él, lo que los tribunales calificaron como una interpretación errónea de la víctima. Un crimen y un tratamiento legal que volvió al debate público durante el juicio de 'la Manada' de Pamplona.
Yllanes fue condenado en firme a 12 años y medio de presidio, trascendiendo a finales de 2017 que una consulta de psicología le había dado trabajo como médico. Fue poco después de cumplir su condena por homicidio cuando emprendió una batalla legal para intentar que no quedara rastro en internet de determinadas noticias que hacían alusión al crimen que perpetró, pidiendo a Google que aplicara el derecho al olvido y bloqueara el acceso a varios artículos que le vinculaban con los delitos sexuales.
Tanto el buscador como la Agencia Española de Protección de Datos rechazaron sus pretensiones y ahora ha sido la Audiencia Nacional la que le ha negado ese derecho al olvido digital. Su caso, dicen los jueces, “sigue siendo objeto de atención de los medios de comunicación”, sobre todo tras el juicio y las distintas sentencias del caso de 'la Manada' de Pamplona. “Hecho que causan una particular repugnancia en la sociedad”.
Asociarle con delitos sexuales, añade la Audiencia Nacional, no es una información “manifiestamente inexacta”. Que esas noticias prevalezcan, dice la sentencia, sigue siendo “necesario” para preservar la información de la población sobre el caso.