La exjuez Manuela Carmena, la candidata propuesta por Podemos para liderar la lista de Ahora Madrid en las próximas elecciones municipales de la capital, ha rechazado el voto del partido de Pablo Iglesias en el Parlamento Europeo en contra de exigir la liberación inmediata de los opositores venezolanos encarcelados por el Gobierno de Nicolás Maduro.
Podemos, que el jueves rechazó junto con Izquierda Unida (IU) la resolución apoyada por los cuatro principales grupos en Europa, consideró la votación un obstáculo al necesario entendimiento. Según dijo el eurodiputado Pablo Echenique, el diálogo pacífico y la apertura de vías de entendimiento entre todas las partes es la única forma de resolver los problemas de Venezuela.
No obstante, para Carmena, quien fue relatora de prisiones indebidas en las Naciones Unidas, los derechos humanos deben situarse siempre por delante, “caiga quien caiga y a toda costa”.
“Donde vaya, donde esté y siempre, yo voy a decir que por encima de todo hay que cumplir los derechos humanos”, ha señalado en Segovia durante una conversación la periodista Alicia Gómez Montano en el marco del V Encuentro de Mujeres que transforman el Mundo.
Esta exvocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y juez emérita del Tribunal Supremo (TS), que considera las prisiones de presos de conciencia un “escándalo” y una “vergüenza”, ha manifestado que se debe pedir la liberación de los opositores. A su juicio, los derechos humanos son una “conquista extraordinaria” del siglo XX, por lo que todos los países han de someterse a los informes de la ONU.
Durante su intervención en Segovia, Carmena se ha vuelto a referir a los motivos que le impulsaron a optar a la Alcaldía de Madrid, una decisión que según ha dicho ha pensado mucho y que en ocasiones le genera cierto temor.
La exjuez ha asegurado que aceptó por compromiso, por la obligación que sintió de estar al lado de los colectivos “de abajo”, los que más están sufriendo. Carmena ha confesado que se sintió influida por la película 'La piedra de la paciencia' y el mensaje que lanza sobre el protagonismo que debe tener la mujer.
“La cultura de las mujeres tiene que llegar a las culturas del poder, y muchas veces nos echamos para atrás por pereza o porque no nos apetece. Pero de pronto pensé que tenía mucha experiencia y que aquí había mucha gente joven, que me conocía y con la que llevaba tiempo trabajando, como las madres contra la droga o personas que luchan contra la exclusión. Pensé entonces que no me podía permitir decir que no”, ha relatado.