“No hay plazos para el reconocimiento y se da al Gobierno margen de maniobra para que reconozca (el Estado palestino) cuando considere que es un acto que efectivamente colabora con el proceso de paz y no es un acto simbólico”, ha resumido García-Margallo, en una rueda de prensa posterior a una reunión de ministros europeos de Exteriores.
Los 28 han discutido en este encuentro cuál debe ser el papel que la UE debe jugar para reactivar las negociaciones de paz, en un debate en el que el titular español ha apostado por una posición coordinada de los Estados miembros para evitar posiciones enfrentadas en foros internacionales. Los Estados miembros han reiterado su llamada a las partes para reanudar las negociaciones de paz con vistas a lograr una solución de dos Estados.
Margallo también ha comparado el debate de este martes en el Congreso de los Diputados con pronunciamientos similares que se han producido ya en países como Reino Unido o Irlanda, o el debate previsto en la Asamblea Nacional francesa a final de mes. Y ha insistido en que todos estos casos, la argumentación coincide en que el reconocimiento se produciría “cuando se den las circunstancias”.
En el caso del texto que votan las Cortes este martes, Margallo ha recalcado, además, que la petición de reconocimiento queda “enmarcada” en dos condiciones: que este paso “impulsa o acelera” el proceso de paz o que se constate que dicho proceso está “bloqueado” y el reconocimiento de Palestina pudiera desatascarlo.
Con ello, el ministro español ha querido señalar que “no hay ninguna modificación” en la posición que el Gobierno defendió en le pasado, respecto a que el reconocimiento llegaría cuando fuera “oportuno”, y la propuesta del martes, que fija condiciones concretas.
En cuanto al papel que podría jugar España en la reactivación de las negociaciones, un escenario que la Alta Representante de Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, quiere que la UE lidere, Margallo ha dicho que será “el papel que la comunidad internacional considere” y ha apuntado su intención de viajar a la región.
CRÍTICAS A LOS ASENTAMIENTOS
En sus conclusiones, los ministros de Exteriores critican la política de asentamientos de Israel y la expropiación de tierras próximas a Belén, una decisión que la UE “lamenta profundamente y rechaza con firmeza” por considerar que pone en duda el compromiso de negociar la paz.
En este sentido, reiteran que la construcción de nuevas colonias va en contra del derecho internacional y alertan de que las construcciones en Jerusalén este dificultes que esta ciudad se convierta en la futura capital de dos Estados, por lo que piden a Israel que dé marcha atrás.
A este respecto, el ministro Margallo ha advertido del riesgo de que si avanzan los asentamientos en Jerusalén este y territorio de Cisjordania, la situación haga “imposible, incluso físicamente” la solución de dos Estados.
También se muestran “preocupados gravemente” por la escalada de tensiones y violencia y condenan todos los actos terroristas recientes, al tiempo que llama a las autoridades de ambas partes a mostrar contención para reducir tales tensiones.
El riesgo de la escalada de tensión en el Monte del Templo, ha apuntado Margallo en la rueda de prensa, puede llevar a que el conflicto se convierta en un “conflicto religioso” con riesgo de “contagio” en todo el mundo islámico.