Podemos arrasa entre los jóvenes. Y gracias a la alianza con Izquierda Unida, podrá recabar también el apoyo electoral que le faltaba en otras franjas de edad. El perfil del votante de Unidos Podemos lo completan los obreros cualificados, parados y estudiantes. Según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), tanto Podemos como IU tiene problemas conseguir el voto de las mujeres.
Los datos se desprenden del barómetro del CIS de abril, que contiene los cruces de los votantes de cada partidos con distintas variables, como la edad, el sexo, los estudios o la condición socioeconómica. Con ellos se puede dibujar el perfil de los votantes que tendrán Podemos e IU, que se presentarán en coalición, aunque el barómetro de abril no lo recoge porque se elaboró en las semanas previas al acuerdo.
Más de la mitad de los votantes de Podemos (51,3%) tiene menos de 35 años. En la franja de edad en la que triunfa la formación de Pablo Iglesias, seguido de Ciudadanos y PSOE. El PP no puede competir en este apartado.
Unidos Podemos está dedicando parte de su esfuerzo de campaña en asegurarse el voto de esa franja de edad. Este mismo domingo se celebra en Madrid un acto bajo el lema “La sonrisa de de la juventud”, y el partido presentó hace unos días la plataforma Marea Joven.
Su objetivo es dar “espacios propios para los y las jóvenes, en y desde los que tener voz propia, y hacer política por nosotros y nosotras”, explicó a eldiario.es la responsable de Juventud del Consejo Ciudadano de Madrid, Isabel Serra.
A la par ha nacido Jóvenes en Pie, un movimiento que se define como apartidista, pero que tiene como referentes a miembros de Podemos como referentes como Íñigo Errejón o Sergio Pascual.
El discurso de Podemos está lleno de referencias a la juventud, y especialmente a aquellos jóvenes que tuvieron que emigrar, representados a través de la Marea Granate . De hecho, este es el tema central de la carta que han enviado a muchos hogares con motivo de la campaña electoral para el 26J.
Firmada con el nombre ficticio de Esperanza, la carta presenta a una joven bióloga que tuvo que emigrar a Londres, y que escribe a sus padres como representante “de una generación que hizo siempre todo lo que se le pidió y que ahora quiere asumir responsabilidades con su país.
Las confluencias también siguen esta estrategia de buscar el voto joven. Pero el problema de Podemos es que al pasar los 35 años sus porcentajes de apoyo caen más de 10 puntos. Es ahí donde se va a beneficiar de la coalición con IU, cuyo grueso de votantes tiene entre 35 y 65 años.
La unión de ambos partidos, sin embargo, no les va a ayudar a recabar el voto de las mujeres. Tanto Podemos como Izquierda Unida tiene problemas en este aspecto, con porcentajes de voto de 42% y el 45,3% respectivamente. Son los partidos con más desequilibrios entre los dos sexos.
La campaña comenzó con un debate a cuatro entre mujeres de PP, PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos. La discusión se centró en temas generales, la violencia machista solo ocupó un espacio pequeño del debate y no se habló de igualdad.
Sin embargo, una de las cuatro candidatas decidió dedicar su último para hablarle sólo a las mujeres. Carolina Bescansa, número 2 de Unidos Podemos por Madrid, se dirigió exclusivamente a las mujeres. Fue la única que lo hizo, intentando atraer su voto para la coalición de izquierdas.
En cuanto a la condición socioeconómica -el perfil laboral de los votantes-, los principales votantes de Podemos son obreros cualificados (12,8%), parados (12,5%) y estudiantes (11,1%). Junto a ellos destacan los directores y profesionales, el último perfil laboral que supera el 10% entre los votantes de Podemos.
IU presenta un perfil algo distinto en esta variable, porque sus votantes se concentran entre los cuadros medios, los obreros cualificados y los trabajadores de oficinas. Ambas formaciones tienen pocos pensionistas y amas de casa entre sus electores.
En cuanto a los estudios que tienen los votantes de ambas formaciones, en Podemos el perfil que predomina es el de quienes han estudiado formación profesional (26,1%), seguido de quienes tienen estudios superiores (18,8%). Su grupo menos numeroso es el de quienes no tienen estudios, que solo representan un 7% del total.
En el caso de IU, el perfil que predomina entre sus votantes es el de quienes tienen estudios superiores, que son casi el 30%. Tras ellos, quienes han completado la ESO (26%) y los que tienen un título de formación profesional (24,6%).