Madrid, 19 jul (EFE).- La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha defendido el “paso decisivo” que supondrá la aprobación de la ley del solo sí es sí, que previsiblemente saldrá adelante este martes en el Senado, y ha asegurado que gracias a esta norma el futuro de las mujeres “será mucho más libre que nuestro pasado”.
La ministra de Igualdad ha defendido en el Senado el proyecto de ley de garantía integral de la libertad sexual, que elimina la distinción entre abuso y agresión y regula la necesidad del consentimiento expreso, y que ha recibido el apoyo de la mayoría de grupos de la Cámara Alta y la oposición de PP y Vox.
Montero ha recordado cómo el movimiento feminista envió, tras la polémica sentencia de La Manada, un mandato claro al Gobierno de coalición: convertir el “sólo sí es sí”, el “hermana, yo sí te creo”, el “no es abuso, es violación” en una ley que fuera capaz de proteger eficazmente a las mujeres de la violencia que sufren pero el mero hecho de serlo.
“Hoy vamos a dar un paso decisivo para responder a la deuda histórica que tenemos con Nagore Laffage y su familia, con las jóvenes de Alcàsser, las víctimas de La Manada y de Manresa, con Laura Luelmo y con todas las que han sido agredidas sexualmente”, ha subrayado la ministra, que ha recordado que una de cada dos mujeres en España ha sufrido algún tipo de violencia machista a lo largo de su vida.
Ha asegurado que con la aprobación de esta ley, España da “un paso decisivo” para la prevención, con educación sexual, formación, detección precoz, atención integral especializada y reparación a las víctimas sin necesidad de poner una denuncia.
“Desde hoy, las violaciones, las agresiones sexuales, el acoso sexual en el trabajo o la vía pública, y la trata con fines de explotación sexual serán vulneraciones de los derechos fundamentales de las mujeres y serán también violencias machistas y sus víctimas, también las de trata, tendrán derecho a acceder a todos los mecanismos de atención y reparación”, ha subrayado.
Según Montero, esta ley coloca de nuevo a España en la vanguardia internacional de la lucha contra las violencias machistas, aunque ha reconocido que aún queda mucho camino que recorrer hasta “dejar atrás una cultura de la violación que todavía existe en este país”.
Se ha dirigido a las mujeres y les ha asegurado que su libertad sexual “es una prioridad para el Gobierno y para las Cortes Generales que hoy dicen 'sólo sí es sí y hermana yo si te creo'” y ha criticado las posturas “reaccionarias y negacionistas” que siempre se han opuesto al avance de los derechos.
La norma ha contado con el rechazo de PP y Vox, que han presentado sendos vetos al considerar que el texto carece de seguridad jurídica, viola derechos fundamentales y supone la desprotección jurídica de las víctimas.
La senadora del PP María Adelaida Pedrosa, que ha calificado la ley de “disparate”, ha denunciado que se trata de un texto que instrumentaliza el dolor de las víctimas, que no van a ver mejorada su protección, y “se carga uno de los pilares fundamentales del estado de derecho, como es la presunción de inocencia”.
Por su parte, el senador de Vox José Manuel Marín ha opinado que se trata de una “chapuza jurídica digna de un estudiante con escasos o nulos conocimientos jurídicos” y ha denunciado que “esta ley convierte en sospechosos a todos los hombres que hayan mantenido relaciones sexuales con una mujer sin un notario delante o que suba en un ascensor con una mujer sin un testigo”.
Desde el PSOE, José María Oleaga ha reprochado a estos grupos que insinúen que las mujeres se van a aprovechar de esta ley. “Es inadmisible”, ha lamentado el senador socialista, que ha apelado al acuerdo político a la hora de sacar adelante esta ley “cuanto antes” y especialmente ante las fechas vacacionales, cuando se produce un repunte de agresiones sexuales.
Para la también socialista Donelia Roldán, esta ley “que la sociedad viene reclamando hace tiempo” viene a subsanar “una de las grandes miserias del ser humano” como es la violencia contra las mujeres, aunque ha reconocido que al PSOE les habría gustado incluir “la agresión sexual mas antigua del mundo, la esclavitud sexual, la prostitución que sufren muchas mujeres en nuestro país”.
“Ya está bien de tener miedo a salir, a que nos echen droga en las bebidas para que nos agredan sexualmente, a ir con miedo en las fiestas de nuestros pueblos, a que nos obliguen a prostituirnos, a casarnos siendo niñas, a que nos mutilen genitalmente para que no sintamos placer”, ha aseverado.
A las víctimas -ha dicho Roldán- les debemos avanzar para que ninguna mujer ni niña tenga que sufrir nunca el miedo y para que podamos vivir tranquilas. “No queremos manadas ni para nosotras ni para nuestras hijas. La sociedad tiene que cambiar, no sólo con penas, sino con educación y con apoyo a las víctimas”.