No era el foro esperado para que Pedro Sánchez abordara la situación política y el escenario de bloqueo que persiste desde julio, pero el presidente en funciones ha aprovechado una intervención para presentar a la ministra de Economía, Nadia Calviño, para lanzar un mensaje horas antes de que el equipo negociador del PSOE se reúna con el de Unidas Podemos para abordar la última propuesta para sacar adelante la investidura: “La solución siempre está en un camino intermedio”.
Sánchez ha asegurado que uno de los motivos por los que escogió a Calviño como ministra fue su capacidad de negociación, “una cualidad esencial en nuestro tiempo”, según ha dicho el presidente en el desayuno organizado por Efeminista. Aunque no mencionó expresamente a Unidas Podemos, la intención del presidente en funciones estaba clara: abordar de manera tangencial el tema del momento, las negociaciones para que España tenga Gobierno y no se repitan las elecciones.
“En la España de nuestros días todos tenemos que entender que saber negociar es querer negociar. No imponer, sino acordar. Y también entender que en una buena negociación no puede haber vencedores ni vencidos. En una buena negociación siempre se abre paso una salida intermedia; una vía que nunca es la postura de partida de una de las partes negociadoras. La solución siempre está en un camino intermedio. Entre dos posiciones opuestas que parecen antagónicas, la solución radica en una tercera vía”, ha resumido el líder socialista.
Esa “tercera vía” es la nueva apuesta del PSOE para lograr el respaldo de Unidas Podemos a la investidura de Sánchez para un Gobierno en solitario en el que se reservarían algunos cargos de la “Administración periférica” a su “socio preferente”. Los socialistas rechazan de plano una coalición, porque Sánchez considera que se demostró “inviable” e “impracticable” tras el fracaso de la negociación con Unidas Podemos en julio y que derivó en otra investidura fallida.
El argumento del PSOE es que “no se da la confianza para ir a un Gobierno de coalición” precisamente por esas conversaciones truncadas y han ideado una nueva oferta, que al menos por ahora resulta insuficiente para Unidas Podemos: un acuerdo programático del que resulte un Gobierno exclusivamente socialista con la incorporación de Unidas Podemos -o personas de su órbita- a instituciones relevantes del Estado, pero siempre fuera de los ministerios. Y para superar la “desconfianza”, el PSOE propone un sistema de “triple garantía” con una Oficina de Seguimiento del pacto dependiente del Ministerio de Hacienda, comisiones en Congreso y Senado y un mecanismo de verificación en el que se integre la sociedad civil.
Esa nueva propuesta, que especificará el PSOE a su potencial aliado en una reunión esta tarde, es la vía intermedia, según Sánchez, entre la coalición que reclama Iglesias y el Gobierno socialista al que inicialmente aspiraba él.
Aplaude a Irene Montero por ganar a Jiménez Losantos
En su intervención, Sánchez también ha querido reclamar una bajada del tono en la política actual: “Nuestra vida política necesita desterrar el insulto y el improperio”. Y ha hecho referencia a los “insultos” recibidos por las exministras Leire Pajín y Bibiana Aído después de que el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, que justificó así la escasez de mujeres en su Ejecutivo de coalición con el PP: “No queremos 'pajines' o 'aídos'”.
“Quiero transmitir públicamente mi respaldo y mi reconocimiento a mis dos compañeras, las exministras Pajín y Aído”, ha dicho el presidente, que también ha felicitado a la portavoz del grupo confederal, Irene Montero, por su victoria judicial frente a Federico Jiménez Losantos por llamarla “analfabeta funcional” o “matona barata”. “Felicitar a Irene Montero por la satisfacción jurídica que recibió en los días recientes”, ha expresado el presidente.
“Los insultos son atentados a la convivencia. Los odiadores, los insultadores, se escudan invocando la libertad de expresión. Y nada hay más opuesto a la libertad de expresión que el insulto. Queremos reclamar la máxima libertad de expresión , por eso proponemos la derogación de la ley mordaza, y queremos desterrar el insulto que contamina la vida pública, ha zanjado Sánchez.