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El presidente de Castilla y León y el consejero de Sanidad, denunciados por las listas de espera

La Asociación El Defensor del Paciente ha denunciado en el juzgado de guardia de Valladolid al presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, y al consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado por la gestión de las listas de espera. El colectivo considera que ambos son autores de “presuntos delitos que afectan a la prestación del servicio público de salud de Castilla y León y por lo tanto a la salud de los castellanos y leoneses”, según la denuncia adelantada por Europa Press y a la que ha tenido acceso eldiario.es.

El Defensor del Paciente se refiere a la “absoluta dejación de funciones, inacción y omisión del deber de protección de la salud” y a la comisión por parte de Herrera y de Sáez Aguado de un delito de omisión del deber de socorro en relación a un delito de denegación de auxilio en la prestación del servicio público de salud tipificados en los artículos 195.1, 196 y 412.3 del Código Penal. Presidente y consejero son responsables, según la denuncia, de la situación de las listas de espera que ponen en “grave riesgo” a pacientes que necesitan cirugías o pruebas diagnósticas con “injustificados riesgos de espera” en los que las patologías se agravan “en el cien por cien de los casos” y que convierten en “imposible” su tratamiento “por leve que al principio fuera su patología”.

“En multitud de casos las esperas son relativas a cánceres ya diagnosticados, que necesitan un tratamiento inmediato y cuyas dilaciones son nefastas para el pronóstico y supervivencia de los pacientes”. Para la asociación existe “falta de atención y voluntad política” para subsanar el problema de las listas de espera a pesar de que saben que la situación agrava las patologías, así como el sufrimiento de los pacientes y sus familiares. Aunque entienden que eliminar las listas de espera es “complejo” sí consideran que se podrían tomar decisiones que palien la situación.

La denuncia detalla casos concretos en cinco hospitales de Castilla y León. Uno de los más llamativos es el del Hospital Virgen de la Concha, en Zamora. A la paciente afectada se le detectó carcinoma con afectación a un ganglio en una mamografía rutinaria realizada a mediados de junio. En el mismo día se le firmaron los papeles para una cirugía y se le dio cita para el preoperatorio el 3 de agosto y anestesista el 6. Cuando la familia preguntó en el hospital cuándo sería la cirugía, se le contestó que a finales del mismo mes. La familia advirtió entonces de que por ley la espera no podía superar los 30 días y el centro afirmó que estaban en lista de espera desde el día 23 de ese mes. “Mi madre firmó los papeles el día 20 (del mes anterior), no me supieron dar respuesta. Creo que han manipulado la fecha del registro en lista de espera” dice la hija de la afectada.

Otro caso que, aparentemente, reviste especial gravedad, es el de una paciente del Hospital Clínico Universitario de Valladolid que padece una infección crónica desde hace tres años por una prótesis de cadera. En febrero, tras empeorar su situación, se le realizaron pruebas que revelaron 5 focos de infección en la pierna izquierda, por lo que se le derivó al traumatólogo para retirar una prótesis que, según su relato, ponía en riesgo su vida si la infección llegaba al torrente sanguíneo. El 30 de abril entró en una lista como ‘preferente’, de manera que se le indicó que en julio se habría producido ya la operación. El traumatólogo dejó el centro y su sustituto coincidió en el diagnóstico pero no en la prioridad de su caso. “He puesto tres quejas en Atención al Paciente y he ido a hablar con él y con Lista de espera, lo único que me dicen es que ya me tocará”, recoge la denuncia.

En el Hospital de León, el pasado 10 de febrero, un paciente ingresó por Urgencias por el sangrado de una malformación arteriovenosa en el cerebro que le provocaba problemas en la visión. Tras pasar 15 días ingresado a la espera de una prueba que realizó el 23 de febrero, recibió el alta. El 27 de marzo el neurocirujano le comunicó que debía someterse a una operación y que su caso no era urgente pero sí peligroso. Así, sin dar preferencia, solicitó para él un escáner que se programó para el 25 de mayo y una cita para el 5 de junio. El paciente se quejó por el retraso, ya que hasta que no se le opere le han “prohibido” trabajar, hacer esfuerzos y “tener una vida normal”. “Yo tenía un restaurante que he tenido que cerrar porque no sé cuánto durará todo esto y nadie me da explicaciones de nada. Ahora no tengo trabajo ni puedo trabajar […] Al comentarle al médico que yo no puedo estar en esta situación, sin trabajo y con la angustia mía y de mi familia por si me pasa algo, su contestación es que ‘es lo que hay’”, cuenta el afectado.

En el mismo hospital se registra el caso de una persona que debe ser operada del ligamento cruzado anterior y que tuvo cita con el médico el 8 de agosto de 2017. En enero de 2018 aún estaba esperando cita para el anestesista.

En el Hospital de Salamanca, un paciente fue informado en octubre de 2017 de que había que realizarle un TAC para saber qué tenía. La prueba no se efectuó hasta septiembre de este año. La operación que necesita, le advirtieron, no se realizaría antes de que transcurriese como mínimo un mes y medio.

En el Hospital Universitario, en Burgos, la asociación refiere el caso de un paciente que acudió al dermatólogo el pasado 28 de febrero con “una herida muy fea en la cara” y que, tras un primer tratamiento fallido, ha sufrido sucesivos retrasos de su cita. En teoría, el dermatólogo, que está de baja, le verá el próximo día 20.

El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, siempre ha restado gravedad a los recortes sanitarios y a las listas de espera. Un día antes de que en Valladolid se produjese una manifestación histórica por la Sanidad, el diario ABC publicó lo que se presentaba como un manifiesto espontáneo apoyando su gestión. Los metadatos revelaron que el texto salió de su ordenador.

Ese mismo texto fue ‘reciclado’ por la Junta de Castilla y León, que lo remitió en una nota de prensa adjudicando la autoría al Hospital de Segovia en defensa de la buena marcha de la Sanidad.

Herrera, que, en caso de que la denuncia presentada este viernes se admita a trámite, afrontaría su primer tropezón judicial, siempre se ha resistido a relevar a Sáez Aguado.