El PSOE recoge firmas en la Eurocámara para instar a Estrasbugo a revocar a la jueza Elósegui

El PSOE da un paso para presionar al Consejo de Europa y al Tribunal Europeo de Derechos Humanos para revocar el nombramiento de la catedrática María Elósegui como nueva jueza española en Estrasburgo por sus “declaraciones homófobas”. La delegación socialista española recoge firmas en la Eurocámara para instar a sendas instituciones a que inicien el trámite de revocación de Elósegui si no se retracta de sus comentarios publicados en entrevistas, artículos e incluso libros. 

La delegación que dirige Iratxe García ha enviado una carta firmada por todos sus miembros al resto de europarlamentarios para que la secundan. La misiva, que está dirigida al presidente de de la Asamblea Parlamentaria que votó a favor del nombramiento de Elósegui y del presidente del Tribunal, relata los comentarios “homófobos” de la catedrática de los que informó eldiario.es

El PSOE considera inviable que Elósegui represente a España en una institución internacional que vela por el cumplimiento de los derechos humanos en el continente teniendo un pensamiento en el que considera que la homosexualidad genera “patologías” o que aboga por “terapias” para las personas transexuales y así lo comparte con el resto de eurodiputados a los que recuerda que la igualdad de género y la lucha contra la discriminación son fundamentales para el Consejo de Europa y para el Parlamento Europeo –dos instituciones que no tienen vinculación entre sí–.

Por eso los eurodiputados del PSOE piden a sus colegas que secunden su petición, que concluye: “Solicitamos que tengan en cuenta nuestras preocupaciones y pidan a la señora Elósegui que dé marcha atrás en sus alarmantes e inaceptables declaraciones o, en caso de negativa, se inicie el procedimiento para revocar su nombramiento como jueza del Tribunal Europeo de Derechos Humanos”. 

Las normas del tribunal de Estrasburgo solo contemplan para la revocación que sea acordada por dos tercios de los miembros que lo integran (uno corresponde a cada estado). Fuentes socialistas admiten que lo único que pueden hacer para evitar la presencia de la catedrática en el tribunal europeo es la “presión política”.