Solo unas horas después de que el Congreso de los Diputados celebrara el 40 aniversario del fallido golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 en un acto presidido por el rey, la Cámara Baja debatió este martes una proposición no de ley de ERC instando al Gobierno a retirar la inviolabilidad de Felipe VI y, también, a eliminar el aforamiento de su padre, el rey emérito, huido de España desde el pasado verano por las investigaciones sobre su patrimonio.
Juan Carlos I había sido el gran ausente del evento sobre el 23F pese a ser, según su hijo Felipe VI, quien con su “firmeza y autoridad” paró la intentona golpista. Pero, además de en los discursos de Felipe Vi y de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, el nombre del rey emérito se volvió a escuchar por la tarde en las tribunas del hemiciclo durante el debate de la iniciativa de ERC que no ha salido adelante en la votación que se ha producido este jueves, porque el PSOE se sumó a las derechas de PP, Vox y Ciudadanos anunciando su voto en contra de la propuesta de los republicanos.
Los argumentos de los socialistas, explicados por la diputada Rafaela Crespín, se centraron en su defensa de la Constitución para “mantener vivo el pacto de convivencia” y porque, según dijo, “el PSOE es un partido de Gobierno”. La parlamentaria explicó que en su formación política son “demócratas con convicción y socialistas de corazón”. “No nos encontrarán alimentando la confrontación ni en contra de las instituciones”, señaló, antes de considerar que “una PNL” no puede “atajar el consenso mayoritario” necesario para reformar los preceptos constitucionales sobre la inviolabilidad del rey.
El PSOE mantuvo esta posición este martes a pesar de que el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el pasado verano se mostró partidario a abrir el debate sobre la inviolabilidad del rey. En una entrevista realizada por elDiario.es e InfoLibre, el jefe del Ejecutivo señaló: “Los aforamientos de cargos públicos deben circunscribirse a su actividad y defiendo lo mismo para el rey”.
ERC reprocha al PSOE de “proteger a una monarquía corrupta”
Durante el debate fueron constantes las apelaciones al PSOE. Carolina Telechea, diputada de ERC, el grupo proponente de la proposición no de ley, consideró que los socialistas “van a tener que explicar muy bien por qué están en contra de suprimir esa prerrogativa para proteger a una monarquía corrupta”. A su juicio, “los múltiples escándalos que pesan sobre la monarquía son de dominio público, tanto que la Fiscalía ha abierto una investigación por las cantidades de dinero” que recibió el rey emérito “de manera irregular”. La diputada también ha recordado que “el rey actual constaba como beneficiario de cuentas bancarias en Suiza”.
“Hasta ahora no hemos visto nada para acabar con prerrogativas de la Casa Real”, les ha dicho Telechea a los partidos del Gobierno que ha considerado que respaldar la eliminación de la inviolabilidad del rey y del aforamiento de Juan Carlos I “se trata de ser demócrata o no”.
Su iniciativa, que fue rechazada, instaba al Ejecutivo a “impulsar todas aquellas modificaciones reglamentarias del ordenamiento jurídico a fin y efecto que todas las personas sean efectivamente iguales ante la ley y, en consecuencia, deban responder ante la administración de justicia en las mismas condiciones”. Así, añade la proposición no de ley, “deben eliminarse por completo del ordenamiento jurídico y en virtud del principio democrático y de igualdad las prerrogativas de inviolabilidad e irresponsabilidad que puedan amparar comportamientos delictivos o irregulares de la persona del jefe del estado, la Casa Real y cualquier miembro de la Corona”.
Finalmente, la propuesta plantea “derogar el artículo 55 bis de la Ley Orgánica 6/1985, de 1 de julio, del Poder Judicial introducida por la Ley Orgánica 4/2014, de 11 de julio que extendía el aforamiento al Rey emérito y a otros miembros de la familia Real”.
Unidas Podemos defiende “el principio democrático” sobre el “monárquico”
Los reproches al PSOE también llegaron por parte de otros grupos como EH Bildu o la CUP. “Hay una protección política que va desde Vox hasta el PSOE”, denunciaba Albert Botran, el diputado de la CUP. “Por eso el CIS no pregunta sobre la monarquía”, aseguraba, antes de introducir en el debate otro elemento que ya sobrevoló por la mañana: que la española, en su opinión, “nada tiene de democracia plena”. “Estoy convencido de que ustedes apoyan que se retire la inviolabilidad”, les decía, por su parte a los socialistas, Jon Iñarritu, de EH Bildu. “¿Cuál es el problema?”, se preguntaba él.
La propuesta de ERC fue apoyada por todos los partidos nacionalistas e independentistas y también por Unidas Podemos, lo que evidenció una nueva división entre los socios del Gobierno. Durante el debate, el portavoz del grupo confederal Jaume Asens, anunciaba su voto a favor porque, en su opinión, “a la institución monárquica le faltan controles democráticos”. “El principio democrático debe imponerse por encima del principio monárquico”, zanjaba.