El debate sobre el derecho a decidir de Cataluña ha llegado al Congreso precedido de un spoiler con detalles como que el 84% de la Cámara iba a decir que no al sí del Parlament. Conocido el resultado de la votación mucho antes del fin de la sesión, el debate se ha centrado en el estilo para matizar las posiciones conocidas de los dos bandos. Siete horas después de empezar el debate, la propuesta ha sido rechazada por 299 votos. Otros 47 la han apoyado y se ha dado una sola abstención.
Los proponentes, CiU, ERC e ICV, han insistido en pedir la consulta para que los catalanes decidan el 9 de noviembre si independizarse o no. Mariano Rajoy ha puesto la Constitución como barrera y ha ofrecido con la boca pequeña reformarla. Mientras tanto, “la democracia no está por encima de la ley”, ha dicho. Alfredo Pérez Rubalcaba, muy interesado es desmarcarse del PP pese a coincidir en el sentido de su voto, ha propuesto sentarse a negociar una reforma profunda de la Carta Magna “para seguir juntos” y ha defendido el federalismo como solución global.
La gama de “síes” de la primera parte del debate ha ido desde el tono historicista de Jordi Turull (CiU) al discurso sentimental de una Marta Rovira que se ha confesado “feliz”, ha hablado de “abrazos” y a la que en ocasiones se la ha visto dominada por la emoción. Antes de subir a la tribuna, se ha acercado al escaño de Rajoy para estrecharle la mano. El gesto ha pillado tan desprevenida a Soraya Sáenz de Santamaría que ha tardando unos segundos en tender la suya.
Jordi Turull (CiU): “Si se quiere, se puede”
Turull había empezado su tiempo de palabra armado de argumentos históricos como la antigüedad de Cataluña, de forma muy similar a cuando Rajoy esgrime que España “es una de las naciones más antiguas del mundo”. Su sentencia de que “si se quiere, se puede” hacer posible la consulta ha venido acompañada del aviso de que no se rendirán porque tienen “otras vías” para lograrlo, incluida unas elecciones adelantadas y plebiscitarias.
Rovira ha tirado de sentimientos para defender que la desafección es en Cataluña “no sentir a España de nuestro lado”. En su exposición ha habido hueco para la queja por la falta de inversiones: “Queremos un Estado que invierta en trenes cargados de oportunidades y empleo”.
Herrera (ICV) reprocha al PP sus firmas contra el Estatut
Joan Herrera ha subido a la tribuna con la soltura de su experiencia como diputado. Y, desde ella, ha hablado con claridad sobre la caducidad del modelo político y la falta de visión de los dos grandes partidos “para entender la plurinacionalidad del Estado”.
Herrera les ha acusado de “estar dinamitando el pacto constitucional” y se ha anticipado a las expresiones de cariño y admiración por Cataluña que Rajoy iba a expresar después para echarle a la cara la recogida de firmas que el PP impulsó contra el Estatut. Herrera les ha recordado que iniciativas como esas sí “rompen España”.
Rajoy: “Yo creo en Cataluña más que ustedes”
En su turno de palabra, Rajoy se ha referido indirectamente a la ausencia de Artur Mas, “escuchamos a todos salvo a aquellos que no han querido venir”. Y ha definido la Carta Magna como “un testamento” que impide la consulta y la petición como “un proyecto de ruptura”. Sus bases han sido el recuerdo del gran nivel de autogobierno, “tienen ustedes muchas competencias” y el más agorero sobre las consecuencias económicas de la independencia, aunque eso no le ha impedido afirmar, tras disculparse por “la vanidad”:“Yo creo en Cataluña más que ustedes”.
Si Cataluña tiene un gran autogobierno es gracias al PSOE, ha venido a recordar Alfredo Pérez Rubalcaba antes de insistir en que es necesario un pacto para reformar la Constitución a fondo y solucionar la cuestión catalana y también acometer el resto de reformas pendientes.
“Diálogo para seguir unidos”
“Este problema se resuelve sentándose y hablando”. Pero Rubalcaba también ha dejado claro su rechazo de plano al referéndum y a lo “dañino” del discurso de “Espanya ens roba” esgrimido por los independentistas.
Ya en el turno de réplica, y después de escuchar a los portavoces de los grupos parlamentarios en el Congreso, Turull ha insistido en que la consulta es viable y se ha apoyado en una cita de Nelson Mandela, la de que “todo parece imposible hasta que no se hace”. La segunda intervención de la representante de ERC, Rovira, ha calentado la bancada socialista hasta el punto de que Rubalcaba le ha pedido que retirase sus palabras. La diputada del Parlament ha acusado al PSOE de llegar tarde al federalismo “después de haber acabado con la vida política de Pasqual Maragall”.
En su segunda intervención, Herrera también ha reprochado al PSOE de “llegar 36 años tarde y con trampa” y a los dos grandes partidos de estar pensando en las elecciones europeas más que de debatir de forma constructiva: “Son buenos estrategas y pésimos gobernantes”. Aunque el reproche principal ha sido al PP por “fosilizar la Constitución” y “agrandar la distancia”, Herrera también ha incidido en que la propuesta federal del PSOE “hace trampa y llega 36 años tarde”.
Rifirrafe por el derecho de autodeterminación
El socialista ha devuelto el ataque con la acusación de que ICV no defiende igual sus posturas en toda España y de falta de solidez en su proyecto: “Seamos serios, ¿con qué Estado quieren federarse?”. Las diferencias en cuanto al tipo de federalismo ha enzarzado también a Rubalcaba con Joan Coscubiela por defender el derecho a decidir. Coscubiela, retado por el socialista, ha dicho ser capaz “de defender lo mismo en Puente Genil que en Hospitalet” y y ha negado la acusación de no poder defender el derecho a la autorderminación fuera de Cataluña.
Pese a todo, su mensaje final ha consistido en la promesa de que va “a intentar convencer al presidente” de que dialoguen para reformar la Constitución. “Primero dialogar, segundo pactar y tercero votar” ha sido el orden de los pasos a seguir.