Nueva York, 27 oct (EFE).- Keith Raniere, el fundador de la secta sexual Nxvim, la cual se camufló como un grupo de autoayuda, fue condenado este martes a 120 años de cárcel en un tribunal neoyorquino después de ser declarado culpable de todos los cargos, entre ellos de tráfico sexual de adultos y menores, posesión de pornografía infantil y crimen organizado, en junio de 2019.
La sentencia del juez Nicholas Garaufis, del distrito este de Nueva York, supone a efectos prácticos una condena de cadena perpetua para el canadiense, al que este martes una quincena de víctimas describieron en el tribunal como un “depredador sexual”, un “racista” un “mentiroso” y un “sádico”.
El caso ha acaparado la atención de los medios por la implicación de varias destacadas personalidades como la actriz de Smallville Allison Mack, la intérprete de “Battlestar Galactica” Nicole Clyne, o la heredera del imperio licorero Seagram's, Clare Bronfman.