El papa Francisco se reunió el pasado miércoles en la Ciudad del Vaticano con el sacerdote dominico peruano Gustavo Gutiérrez, uno de los creadores de la Teología de la Liberación, movimiento surgido en Latinoamérica tras el Concilio Vaticano II (1962-1965).
El portavoz de la Santa Sede, Federico Lombardi, confirmó hoy que la entrevista tuvo lugar antes de la audiencia general del pasado miércoles en la Casa Santa Marta, la residencia vaticana en la que se hospeda el papa argentino desde el inicio del cónclave en el que fue elegido pontífice en marzo pasado.
Lombardi, sin embargo, no ofreció detalles de la conversación durante el encuentro privado, con el que el papa argentino aprovechó para saludar al sacerdote peruano, quien se encontraba por la península Itálica.
Gutiérrez había viajado a Italia para presentar la reedición de su libro “De parte de los pobres, teología de la liberación, teología de la Iglesia”, escrito en colaboración con el actual prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el teólogo alemán Gerhard Ludwig Müller.
Ya a principios de este mes el diario vaticano, “L'Osservatore Romano”, daba espacio a la publicación de la reedición de este libro, lo que se interpretó como una muestra del regreso de la Teología de la Liberación al seno de la Iglesia Católica.
“Con un papa latinoamericano la Teología de la Liberación no podía quedarse mucho tiempo en la sombra, donde ha estado relegada desde hace años”, aseguraba en un artículo en el periódico Ugo Sartorio, comentarista vaticano que hacía una reseña del libro.
El analista vaticano explicaba que la Teología de la Liberación había quedado “fuera de juego por un doble prejuicio: uno, que todavía no ha metabolizado la fase conflictiva de mediados de los años 80 (...) y otro, el rechazo de una teología considerada demasiado de izquierdas y por tanto, tendenciosa”.
La Teología de la Liberación surgió en Latinoamérica a mediados de los años 60 del pasado siglo y el Vaticano vio el peligro de que los intentos de los teólogos de profundizar en la liberación de los pobres se vieran inspirados por ideas marxistas ajenas al mensaje cristiano, por lo que quedó relegada.
Gutiérrez, de 85 años y uno de los creadores de la Teología de la Liberación, ha criticado duramente el marco político que ha hecho que en Latinoamérica se perpetúe la pobreza de un modo extendido y recibió en 2003 el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades por su preocupación por los más desfavorecidos.