UPyD se ha dividido tras el batacazo electoral en Andalucía. Varios dirigentes de la formación magenta han dimitido de la dirección ante la falta de explicaciones por ese descalabro. También han pedido la retirada a Rosa Díez, que se resiste a dar un paso atrás pese a la situación del partido. “Aún no ha llegado el día en que UPyD deje de ser necesario”, ha expresado la líder de la organización hace unas horas, después de que los miembros de su dirección dejaran patente la división interna.
“Hemos perdido la batalla, pero no nos vamos a retirar”, manifestó este lunes Díez, que negó que fuera a echarse a un lado después de que la formación haya vuelto a quedarse sin representación en el Parlamento andaluz. Varios dirigentes, entre ellos la diputada Irene Lozano, consideran que Díez debe “asumir responsabilidades y renovar el partido”. “Espero que Rosa Díez reflexione y se dé cuenta de que lo importante son los fines y no las personas”, ha expresado Lozano.
Aun no ha llegado el día en que UPyD deje de ser necesario. Por eso no podemos consentir sin pelear que destruyan todo aquello que amamos.
— Rosa Díez (@rosadiezupyd) March 24, 2015
Díez ha respondido a través de Twitter tras la marcha de cuatro integrantes de la dirección: “Aún no ha llegado el día en que UPyD deje de ser necesario. Por eso no podemos consentir sin pelear que destruyan todo aquello que amamos”, ha dicho.
La portavoz de UPyD no asistirá este martes a la Junta de Portavoces del Congreso, ya que, según fuentes del partido, tenía prevista una cita. No obstante, esas mismas fuentes apuntan que hará declaraciones a lo largo del día.
La división en UPyD es patente desde hace varios meses, cuando el ahora exeurodiputado Sosa Wagner encabezó las críticas a Díez, a quien acusó de “autoritarismo” interno. El grupo magenta en el Parlamento Europeo está partido por la mitad, entre los partidarios de unirse a Ciudadanos y los defensores de Díez.