Pedro Sánchez afea al PP que plantee que gobierne la lista más votada siempre que son los conservadores los que quedan en primera posición. “¿Están hablando de Andalucía? ¿De la ciudad de Madrid? ¿De Ourense? Cuando el PP habla de la primera fuerza política es siempre que ellos sean la primera fuerza política”, ha expresado el presidente en referencia al planteamiento que ha deslizado Alberto Núñez Feijóo de que se permita gobernar al más votado. “Las cosas hay que afrontarlas de cara y si se quiere poner un cordón democrático a la extrema derecha, se puede poner; y quien no quiera ponerlo tendrá que responder por ello, pero que no se busque excusas de mal pagador”, ha afirmado.
Sánchez ha asegurado que “el PSOE le dio una alternativa al PP” para que no gobernara con Vox en Castilla y León: “Fue la abstención del PSOE en las cortes si se planteaba cordón democrático a la ultraderecha”. El presidente insiste en trasladar la presión a Feijóo, al que pide que pase de la “ambigüedad a lo concreto”. “Lo concreto es que cuando el PP, lo dirija quien lo dirija, ha tenido que optar, ha optado no por el cordón democrático sino por abrazar a la ultraderecha”, ha dicho en una rueda de prensa en Versalles, donde ha participado en la cumbre informal de líderes de la UE.
Sánchez ha reconocido que ha recibido algún “comentario” al respecto de sus colegas europeos en estos días de reunión informal en Versalles, pero no ha querido revelar de quién. Ha aprovechado, eso sí, para recordar que el presidente del PP europeo ha lamentado que “la derecha española ha claudicado ante la ultraderecha” por el pacto alcanzado con Vox en Castilla y León. En ese sentido, ha dicho que le gustaría que el principal partido de la oposición se “asemejara” al “centro derecha europeo” que establece un “cordón” a la extrema derecha.
“Hemos visto en una agencia de información internacional un titular muy grave, y es decir que la ultraderecha, por primera vez desde Franco, va a poder participar en un Gobierno autonómico o en tareas ejecutivos. Esto es lo que piensa el mundo de lo que ha sucedido en Castilla y León”, ha señalado el presidente en referencia a la información de la agencia Reuters sobre el nuevo gobierno de Alfonso Fernández Mañueco.
“Creo que estamos en un momento grave para la democracia española, estamos en un momento crítico para la democracia, no quiero quitarle paños calientes a esta situación”, ha afirmado Sánchez, que cree que es de “profunda preocupación” que se pretenda “reducir a los agentes sociales”, se “banalice la violencia contra la mujer” o se “señale al inmigrante”. También ha dicho que le genera “tristeza y malestar” que en un país como España, que es uno de los países con más desaparecidos de la guerra civil, se “frivolice y se plantee la derogación de un decreto de memoria histórica”.